Un tanto vacía por los muchos ceutíes que se han ido a Marruecos a celebrar con sus familias la principal fiesta anual del calendario islámico y por los que han aprovechado el día de descanso para escapar al país vecino o a la Península, Ceuta amaneció este miércoles aletargada en el centro y bulliciosa y de gala en la periferia para celebrar la primera Pascua islámica del Sacrificio incluida en el calendario laboral de la ciudad, algo que no sucedía con una festividad religiosa no católica desde 1492.

Un sol timorato y poco más de 13 grados de temperatura han recibido a los aproximadamente 1.500 fieles que se animaron a acudir a la convocatoria de la Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta (UCIDCE) para participar del rezo colectivo al aire libre organizado en Loma Margarita, oficiado por el imam tetuaní Otman Benjalu, suplente habitual en la mezquita de Masyid An Noor, quien ha trufado su sermón con alusiones a la necesidad de que las familias insistan en la necesidad de que sus hijos se eduquen y formen adecuadamente.

Hasta allí se han desplazado el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, con parte de su equipo de Gobierno y las principales cadenas de televisión privadas del país. Telecinco, Antena 3 y Cuatro han emitido en directo el inicio de la Musal-la y han compartido con los ceutíes de confesión musulmana su alegría por ver, por fin, reconocida oficialmente y extendida a toda la población local esta celebración.

El líder del Ejecutivo autonómico (que a diferencia de lo que hizo en la Musal-la de final de Ramadán sí ha seguido en directo parte de la oración) y su consejera de Educación, Mabel Deu, se han sumado a esta satisfacción y en declaraciones a los periodistas ha extendido a todos los grupos políticos con representación institucional el haber conseguido dar una muestra más de esa “convivencia real” que según ha dicho “se vive cada día en las calles, en los colegios, en los comercios y en todos los rincones de Ceuta”.

Simultáneamente, en Sidi Embarek otro medio millar de personas han secundado la llamada de Luna Blanca para orar con el imam de la mezquita anexa, Mohamed Zaqlul.

Al filo de las 10.00 horas los congregados en ambos espacios se han dirigido a sus hogares para, algunos en las 15 carpas instaladas por la Ciudad en diferentes barriadas, y la mayoría en sus propios domicilios o en la calle, como cada año, cumplir con la tradición de dar muerte conforme establece el rito islámico a más de 5.000 cabezas de ganado entre algunos lamentos porque no se permitiese importarlos a través del Tarajal.

Cerca del mediodía la lluvia ha hecho su aparición, como el año pasado, tras respetar el núcleo fundamental de una celebración que en la mayoría de los hogares musulmanes se prolongará hasta el sábado.

Unos 200 ceutíes están celebrando este miércoles Eid El Kebir en La Meca, de donde regresarán durante los próximos diez días.

Lea también:

- La celebración de la primera Pascua del Sacrificio musulmana como festivo laboral, en imágenes

- El Gobierno ceutí amplía a El Rocío el despliegue de carpas para la Pascua musulmana del Sacrificio

- El PSOE de Ceuta se acerca a la cultura de la comunidad musulmana en el Polígono

- Los parados dejan a un lado los bombos para respetar la fiesta del sacrificio

- Los musulmanes ceutíes volverán a rezar divididos en la Pascua del Sacrificio

- El PDSC ataca a los socialistas ceutíes y al delegado por "discriminar" a los musulmanes