La escuela de danza de Lesmes cerró el curso este fin de semana y lo hizo con un recital ofrecido por sus más pequeñas para mostrar al mundo todo lo aprendido durante los últimos meses.
El auditorio entregado, con padres, familia y amigos, de las bailarinas en las gradas, babeando ante los progresos sobre el escenario de sus niñas se derritió ante el espectáculo. Y no sólo porque no se notara ni un poco el aire acondicionado.
En la primera parte del espectáculo las alumnas pusieron en escena el clásico ‘Oz’, muy logrado en la escenografía y con un ritmo ameno y ágil, que sacó el máximo partido a la partitura de la obra.
En la segunda parte se impusieron los ritmos flamencos y como broche final una coreografía de danza urbana.