Además, SalZone, según ha explicado su presidente, Keke Raggio, tiene ya en imprenta un libro de recetas y prepara ya la declaración de las salazones como Bien de Interés Cultural (BIC), proyecto para el que se ha recopilado todas las grabaciones realizadas en los secaderos y la información recopilada por José Manuel Pérez Rivera, director técnico del proyecto que trabaja ya con la directora de Educación, Teresa Troya en la planificación de la que sería la primera declaración de Bien de Interés Cultural inmaterial.
.Este proyecto, como poco más de un año de andadura, quiere subrayar el “giro de 360 grados” que ha experimentado su relación con el Gobierno local, a quien agradece su colaboración en los últimos proyectos, especialmente a la Consejería de Medio Ambiente, que dirige Emilio Carreira, que ha aprobado recientemente la ampliación de la red de saneamiento a la explanada del Chorrillo, imprescindible para el buen desarrollo de las labores de los maestros salazoneros. “ES muy importante para los secaderos poder sanear sus instalaciones y el producto que trabajan a través de la red de vertidos residuales”, aplaude Raggio.
Por otro lado, desde SalZone agradecen el trabajo del ex diputado Juan Bravo (PP) y el ex senador Guillermo Martínez (PP) por sus gestiones en Madrid para encajar la tradición salazonera en el marco comunitario, algo especialmente complejo al estar fuera de la Unión Aduanera. “Sabemos que se trabaja con el Ministerio de Agricultura y Pesca para conseguir la trazabilidad legal del pescado de Ceuta”, agradecen desde SalZone.
No son en también la colaboración de Servicios Turísticos, que ha recepcionado las ocho propuestas del proyecto Salazones de Ceuta y a la Consejería de Sanidad y Consumo por su apoyo al proyecto de futuro secadero en la ciudad autónoma.