El escándalo de la Milla Urbana reaviva el debate sobre el papel del ICD, que el Pleno ya aprobó disolver en 2011 por anacrónico. La FDMEC ve necesario, además de portenciar el "deporte inclusivo", potenciar "la participación en las políticas deportivas de todas las entidades, clubes, federaciones y estamentos a través de un Consejo de Deporte Local".

La Federación de Deportes de Montaña y Escalada de Ceuta (FDMEC) ha dejado patente este lunes en un comunicado el "profundor malestar" que le han ocasionado "los impedimentos puestos a Agustín de Sousa, deportista de un club asociado y con licencia federativa vigente, durante la celebración de la XXXI Milla Urbana organizada por el ICD". "Aunque esta modalidad deportiva no es competencia directa nuestra, entendemos que el deporte, en general, no solo debe ser integrador sino además inclusivo, lo que conlleva la práctica conjunta de personas sin o con discapacidad", ha subrayado la Federación.

La FDMEC ha explicado que la Federación Española del ramo ya modificó sus Estatutos "para no solo integrar sino también incluir modalidades conjuntas, línea que seguimos de acuerdo con lo marcado por el Consejo Superior de Deportes, que ha considerado este ejercicio como Año del Deporte Inclusivo".

Lo acontecido en la Milla Urbana ha puesto, a jucio de la FDMEC, "en evidencia la necesidad de desarrollar en Ceuta sin más dilación el deporte inclusivo en todas sus modalidades, par lo que se hace necesaria la creación de una Comisión de Deporte Inclusivo en el ICD, encargado de gestionar las actividades deportivas de la Ciudad, con las distintas federaciones y asociaciones que representen a estos colectivos".

"Lo ocurrido con De Sousa debe marcar un punto de inflexión de lo que ha sido y debe ser la participación en actividades deportivas de las personas con discapacidad en Ceuta y vemos necesario potenciar la participación en las políticas deportivas de todas las entidades, clubes, federaciones y estamentos a través de un Consejo de Deporte Local", ha resumido. El Pleno de la Asamblea ya aprobó en 2011 la disolución del ICD, decisión nunca ejecutada por Vivas.

Para terminar, la Federación ha pedido "disculpas" y ha instado a hacer lo mismo con el atleta agraviado y su familia "a todos aquellos que por acción u omisión no permitieron la participación de Agustín en la prueba".