El diario marroquí 'le360', al que se sitúa en la órbita más cercana al Palacio Real del país vecino, apunta que Marruecos planea crear "un depósito aduanero" en su parte de la frontera del Tarajal para dinamizar "el establecimiento de una actividad económica legal" que supla al porteo, las "actividades ilegales del pasado", según las describe.

"Después del cierre deffinitivo del puesto fronterizo del 'Tarajal II' en Bab Sebta y del cese del flujo de personas que transportaban mercancías de contrabando, las autoridades públicas están ultimando un plan que se implementará rápidamente para ofrecer actividades alternativas" al comercio transfronterizo.

¿Cómo? Según las "fuentes bien informadas" que se citan, una vía que "actualmente se está considerando seriamente" pasa por "establecer, en el puesto fronterizo de Bab Sebta espacios dedicados a depósitos aduaneros para los operadores importadores marroquíes, que podrían almacenar todo tipo de productos importados legalmente por Tánger-Med".

La clientela diana serían "los comerciantes de ciudades vecinas" como Castillejos que hasta ahora se abastecían en Ceuta. Así, el Reino alauita cree que mataría "dos pájaros de un tiro": reemplazaría el "contrabando" por "una actividad comercial perfectamente legal" y activaría un polo de generación de empleo.

Los comerciantes pagarían derechos de aduana "solo hasta los volúmenes vendidos" y el excedente de mano de obra del porteo se intenntaría reubicar en la región y "más allá", en industrias como la automovilística a través de operadores como Renault.

"También pueden existir otras oportunidades en la zona franca de Tánger y la cuenca industrial del puerto de Tanger-Med o en ciudades más distantes, como Kenitra, donde operadores como PSA Peugeot y todo el ecosistema de fabricantes de equipos que lo rodean pueden contribuir a esta operación de redistribución", apunta la prensa del país vecino, que subraya que esa es la idea de los "altos funcionarios públicos".

Para "las personas que, debido a su edad, falta de educación o discapacidad", tienen peores perspectivas de empleabilidad fuera del porteo "no se pueden descartar ayudas directas".  "Lo que es seguro" es que tras acabar con los porteadores "las autoridades públicas buscan encontrar actividades legales y a largo plazo alternativas para ellos".