La contraseña es incorrecta. ¿Ha olvidado su contraseña? Una escena que se repite miles de veces cada minuto en el mundo y que desencadena un tedioso periplo para recuperar la clave. El código pin del móvil, el desbloqueo, el correo electrónico, las redes sociales, la cuenta del banco... Estamos obligados a escoger: ¿Decenas de claves para otros tantos dispositivos, redes sociales, etc. o una contraseña sencilla para todas las cuentas? Uno de esos problemas del Primer Mundo que no existían en la era analógica y que suponen un incordio para cualquiera que viva en la era digital. Un problema que nos afecta a todos pero uno se puso manos a la obra.

Klaus Swarz, tenía obsesión: librarse de las odiosas contraseñas en Internet, esa farragosa e ineficaz medida de seguridad con tendencia a ser olvidada. Y lo ha logrado. Su empresa, Biocryptology, presenta su innovación en las Jornadas ‘BetOn Ceuta’, en plena expansión de la empresa.  Biocryptology apuesta por los sistemas biométricos para crear la contraseña perfecta, imposible de olvidar o de hackear: nosotros mismos.

Swarz, millonario holandés, fundador de Biocryptology, es un ingeniero con varias patentes en el sector petrolífero, empresario petrolero –además de piloto de carreras y propietario del circuito Ascari de Ronda (Málaga)- que decidió invertir para buscar cómo acabar con las contraseñas, relata Javier González, Sales Manager de Biocryptology, que ha venido a Ceuta a presentar su innovación al sector del juego on line, aunque, el sistema de contraseña biométrica es aplicable a casi cualquier campo de internet, desde las ventas electrónicas al acceso a servicios de finanzas o redes sociales o para el acceso de menores a determinadas webs, en especial las dedicadas a apuestas en línea.

Biocryptology estuvo dándole vueltas durante años, buscando el modo de hacerlo hasta que la tecnología    no solo lo ha hecho posible, sino que cabe en el bolsillo: el Smartphone. “Los móviles de hoy en día lo han superado, tenemos la posibilidad de tener biometría en el teléfono por lo que ya no hace falta un dispositivo externo, con mi propio móvil me puedo identificar”, explica el responsable de ventas de Biocryptology.

Una contraseña sencilla, inolvidable e inviolable. Imposible de hackear, a salvo del temido phising (robo de contraseñas). “Te identificas con la biometría de tu dispositivo, los datos no viaja, no es hackeable, está en tu teléfono”, subraya Javier González, y especialmente valiosa para un sector como el del juego on line, bajo los focos por la creciente cifra de menores enganchados a las apuestas “En el sector del juego, como en el de los servicios financieros, hay unas necesidades de registro fuertes, si estás registrado en una tienda online, por ejemplo, te piden el DNI y lo verifican, pero el problema surge después, las siguientes veces es solo una contraseña y Biocryptology es una garantía adicional a la contraseña para autentificar que ese dispositivo es el usuario registrado”.