Esta tarde los comerciantes y hosteleros de la calle Jáudenes han recibido el jarro de agua fría de la contestación por parte de Gobernación a su petición para cerrar al tráfico la calle, llena de establecimientos hosteleros durante los días 24 (Nochebuena) y 31 (Nochevieja). Días en los que desde el mediodía la aglomeración de personas en los bares de la zona es absolutamente masiva.

Preguntado por la cuestión el presidente del Gobierno local, Juan Vivas, se ha escudado en los informes de los técnicos. “La resolución tiene que estar basada en el informe de la policía que es quién entiende de las cuestiones de circulación de personas, de tráfico de aglomeración de personas y la policía en el informe que ha emitido no recomienda que se acepte esa peatonalización parcial de la calle durante el día 24. La responsabilidad obliga a atender las recomendaciones de la policía”, ha manifestado Vivas.

Si bien preguntado por la diferencia de criterio que permite cerrar al tráfico la calle durante las procesiones de Semana Santa, el Corpus o las habituales procesiones de carácter religioso que con motivo de aniversarios varios han venido realizándose de forma frecuente y transitando por la vía, Vivas no ha sabido concretar y ha declinado valorar esas consideraciones pidiendo respeto para los técnicos.

Las declaraciones las ha realizado durante la inauguración de la Noche en Blanco y en presencia del presidente de la Cámara de Comercio, Karim Buláix, que acababa de tener conocimiento poco antes de la denegación.

El propio Buláix que ha anunciado que hará un seguimiento al asunto en los próximos días para conocer los criterios técnicos y lo que dice el informe, dando a entender que el partido no ha terminado, ha reclamado coherencia y ha pedido que si en Semana Santa se puede cerrar también se cierre en días como el 24 y el 31.

“Comprendemos al ayuntamiento pero entendemos que si hay motivos que permitan cerrar la calle Jáudenes en Semana Santa, esos mismos motivos tienen que prevalecer también en situaciones de estas”, ha manifestado.

Y ha puesto la puntilla al considerar casi más peligroso para los peatones que la calle mantenga el tráfico rodado esos días. “Es más, la calle Jáudenes se llena tanto el 24 y el 31 que casi es impracticable. Poner las medidas para que se pueda disfrutar de unas tardes y unos días, que es prácticamente imposible pasar por ahí con el tráfico rodado, sería más fácil crear medidas que permitiesen esos días el uso de esas calles y que todo el mundo quedara satisfecho”, ha añadido.

A sabiendas de que el no a los comerciantes y hosteleros de la zona a su petición va a generar malestar, Vivas ha anunciado que se reunirán con ellos este sábado para comunicarles su negativa, al tiempo que les ha reconocido la “excelencia” con la que se vienen desempeñando en su labor hostelera y les ha anunciado un proyecto de remodelación.

“El Gobierno tiene encima de la mesa la remodelación de la calle Sánchez Prados, Jáudenes y aledaños de la plaza de África que tiene como objetivo fundamental conseguir lo que en su momento se consiguió con el Revellín. Ahí la interlocución con los comerciantes y los hosteleros de la calle Jáudenes va a ser muy importante. Y nos vamos a poner a trabajar de manera inmediata”, ha explicado Vivas.

Mercadillo navideño

No ha querido entrar el presidente Vivas a la polémica suscitada por el mercadillo navideño ubicado en la Marina por iniciativa del Gobierno. Un mercadillo que es visto con recelo por el comercio local, tal y como ha manifestado el propio presidente del Centro Comercial Abierto, Ernesto Valero.

Y sobre el que el propio gerente de Servicios Turísticos, sentado en la sede de la empresa municipal en el baluarte de los mallorquines crucificó también al desmarcarse de la medida del Gobierno al que pertenece y censurar a su vez la iniciativa que cuenta con el visto bueno y la licencia de la consejería de Fomento.