El delegado de la Comisión Islámica de España (CIE) en Ceuta, Hamido Mohamed, ha insistido este domingo en recomendar que las cinco oraciones diarias o la del viernes en las mezquitas (que podrían reabrir este lunes con limitaciones de aforo) y cualquier otra actividad religiosa musulmana "que implique aglomeración" se mantengan suspendidas hasta el próximo 10 de junio, cuando si no hay retrocesos la ciudad autónoma podría entrar en la fase 3 de la desescalada de las medidas dictadas en el marco del estado de alarma.

La CIE, que a nivel nacional ya trasladó esa misma posición el pasado lunes, y la UCIDCE son partidarias también de no festejar la Musal-la, la oración comunitaria al aire libre, que debería poner fin al mes de Ramadán de este año.

"Queremos agradecer el esfuerzo del conjunto de la sociedad, de la que los musulmanes somos parte, para iniciar esta fase de desescalada, así como el trabajo de la sanidad y otros servicios esenciales para sostener la vida cotidiana", ha resaltado Mohamed.

El delegado ha aplaudido "el esfuerzo de las comunidades islámicas" que han colaborado "en actividades sociales en beneficio de los menos favorecidos" y, en nombre de la CIE y la UCIDCE, ha trasladado la tristeza de los musulmanes "por los efectos devastadores de esta pandemia a n¡vel social, económico y en vidas humanas".

"Nos solidarizamos con todas las víctimas y nuestro deseo es que los enfermos se recuperen y sanen y que los fallecidos descansen en paz", ha resumido en un comunicado en el que también ha hecho un llamamiento a los musulmanes para que sigan "cumpliendo con responsabilidad las reglas del confinamiento social y la desescalada, protegiendo así sus vidas y salvaguardando a la sociedad".

La CIE considera que los templos musulmanes necesitarán apoyo de la Administración para "la colocación de geles desinfectantes, preparar los oratorios de acuerdo con las distancias de seguridad recomendadas y evitar aglomeraciones a la entrada y salida", así como tiempo "para la desinfección de sus dependencias y adaptación a la nueva normalidad".

"Los fieles musulmanes que acudan a las mezquitas deben ser informados previamente de todo este proceso, como son las restricciones y condiciones de acceso, las distancias que deben mantenerse, la necesidad de acudir cada uno con su alfombrilla, el uso de los baños para realizar las abluciones, el uso de los libros que hay en los oratorios, o la necesidad de limitar los saludos con las manos y abrazos para evitar focos de contagio", ha añadido.