Correos no sale del ojo de la polémica. A finales del año pasado fueron algunos sindicatos docentes los que pusieron el grito en el cielo por la gestión del voto a distancia en las elecciones a la Junta de Personal de maestros y profesores. Hace unas semanas, UGT y CCOO se cruzaron no tan veladas acusaciones de enchufismo. Ahora es CSI.F la central que ha cargado contra el máximo responsable de la empresa pública en la ciudad autónoma por considerar sus instalaciones "su cortijo particular" y por vetar a su representante autonómico, Ricardo Martínez, el trato directo con los empleados.

A través de un comunicado de prensa la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI.F) ha "denunciado" que el pasado viernes Martínez García, "en su calidad de máximo representante del sindicato en Ceuta, y por tanto de todos sus afiliados", se dirigió a la sede de la oficina de Correos, sita en la Plaza de España, "al objeto de visitar a los afiliados de CSI.F allí presentes como en anteriores ocasiones".

"Al identificarse como el responsable de CSI.F en Ceuta, los responsables de la seguridad de las instalaciones le indicaron educadamente que no le estaba permitido el acceso a las dependencias, y que tan solo pueden acceder los representantes de la propia oficina de Correos", ha explicado los hechos la central, que ha querido "recordarle" públicamente al jefe provincial de la empresa "que las oficinas no son su cortijo particular, al menos ahora ya no, y que de ninguna manera pude coartar el libre ejercicio de nuestros representantes, ni por supuesto, prohibir el acceso a las dependencias de Correos según le venga en gana, ya que entendemos que se trata de un ataque directo contra la libertad sindical".

"Quizá en los últimos años el caciquismo y el despotismo hayan sido las herramientas utilizadas para dirigir Correos en Ceuta, pero ese tiempo ya ha pasado", ha advertido CSI.F, que ha alertado públicamente de que existe una campaña de "acoso y derribo continuada y muy beligerante en contra de nuestra organización y sus afiliados en la sede de Correos por parte de otras organizaciones sindicales y sobre todo por parte del jefe provincial y sus adláteres".

"Vamos a poner en manos de nuestros asesores jurídicos los acontecimientos que se dieron en la mañana del viernes, así como cualquier otro intento de perjudicar, entorpecer o imposibilitar el ejercicio de representación de los trabajadores libremente, para que se interponga o interpongan las denuncias pertinentes por un delito contra la libertad sindical", ha anunciado CSI.F, que ha cerrado su comunicado "reconociendo el espléndido trabajo de los encargados de la seguridad de las oficinas de Correos en Ceuta, quienes cumplen escrupulosamente con su trabajo, y con las órdenes que les dan sus superiores".

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