El Instituto Nacional de Estadística publicaba esta semana los datos del padrón actualizados a primero de enero de 2017. Oficialmente residen en la ciudad autónoma 84.950 ceutíes, 440 más que el año, un 0,30 por ciento más. Pero detrás de los grandes números se esconden datos singulares que ofrecen otra mirada a la realidad de Ceuta y de los ceutíes. Datos que invitan a la reflexión en una ciudad de 19 kilómetros cuadrados en la que el número de habitantes ha crecido un 13 por ciento  desde 1998, sumando en una década más de 10.000 habitantes. En 1998, último dato disponible con la nueva metodología estadística, Ceuta registraba 72.117 habitantes, frente a los casi 85.000 de la actualidad.

Fueron necesarios cinco años para sumar 5.000. Los 10.000 restantes llegaron en menos de una década. En 2006 sumaban 75.000 ceutíes, diez años después se rozan los 85.000. Desde 2008 a 2012, los peores años de la crisis, la ciudad autónoma vivió su mayor repunte poblacional.

Una ciudad en la que, además, casi el 40 por ciento de los nacidos en ella decide abandonar. Según el Instituto Nacional de Estadística en España viven 90.754 ceutíes, caballas de pura cepa con partida de nacimiento que así lo demuestra, pero solo 57.756 viven en la ciudad autónoma, el 63 por ciento. El 37 por ciento restante vive repartido por España y el mundo. En lo que respecta al territorio nacional, competencia del INE, viven 32.998 caballas la gran mayoría en Cádiz (5.920) y Málaga (5.651), así como Madrid (4.264) y Barcelona (3.464). Granada, Sevilla, Canarias o Valencia son las otras provincias  en las que hay al menos un millar de ceutíes empadronados. En el extremo opuesto, los lugares de España donde menos compatriotas hay para montar una Casa de Ceuta son, con diferencia, las más frías: Soria (11), Palencia (17), y Teruel (18).

Unas preferencias que, curiosamente se reproducen a la inversa. A este lado del estrcho viven más de 3.00 gaditanos, más de 2.000 malagueños, mil sevillanos… pero solo 6 turolenses, 33 palentinos o 22 sorianos. Curiosamente hay el doble de sorianos en Ceuta que ceutíes en Soria.

Es Ceuta una de las poblaciones más jóvenes de España, 36,8 años, sólo por encima de los 35,2 años de media de los melillenses, ambos con los mayores grupor de población entre los 30 y los 50 años. Muy por encima de País Vasco, con una edad media de 45 años, o Galicia, 46.

De esos casi 85.000 residentes en Ceuta, 5,643, el 6 por ciento, son extranjeros, de los que el 6,3 por ciento, o sea casi todos, son marroquíes. El siguiente colectivo de foráneos son los chinos, con 139 ciudadanos residentes en la ciudad autónoma. Por unas pocas de cenas, no más de tres, se cuentan el resto, en su mayoría europeos, belgas (32), franceses (29), italianos (25), alemanes (14), holandeses (48), británicos (30) y un suizo, un ghanés, un maliense, un senegalés…así hasta sumar una veintena de nacionalidades. Y ni rastro de nepalíes, vietnamitas,, neozelandeses, saudíes, ni iraníes, ni iraquíes, tampoco uruguayos ni kazajos.

Solo un pero a los datos del INE: dan fe de un maltés empadronado en Ceuta. Ya no, marchó a Alemania este mismo domingo.