El secretario general y portavoz de la Plataforma Millán Astray, Guillermo Rocafort, ha tildado de "magnífica" la defensa de que la calle que lleva en la ciudad autónoma el nombre del fundador de La Legión ha hecho el Gobierno local y ha alabado que "tanto Imbroda como Vivas son dos hombres a la altura de la Historia y de los hechos", ya que a su juicio el general aludido no cumple ningún requisito de la Ley de la Memoria História para ver suprimido su nombre del espacio público.

"Ni estaba en España el día del Alzamiento ni participó activamente en la Guerra ni protagonizó represalias: al contrario, paró las 'sacas' de Salamanca, salvó a cientos de personas y realizó una elogiable labor social en Vallecas, el barrio de Las Latas como se conocía entonces a la zona, en Madrid", ha señalado Rocafort.

El portavoz de la Plataforma, que ahora espera el pronunciamiento del Tribunal Superior de Justicia de Madrid sobre las sentencias cruzadas en primera instancia en relación con la legalidad de la retirada del nombre de Millán Astray de una calle de la capital, cree que el caso madrileño es similar al ceutí, un reconocimiento "previo a la Guerra Civil" que atiende "a su participación en la Guerra de Filipinas, a la fundación de La Legión y a sus cuatro mutilaciones".

La entidad también se ha personado en procesos abiertos en Cartagena, Plasencia, León o Huelva y ha denunciado y demandado a la alcaldesa de Madrid o al presentador de 'El Intermedio' por presuntos delitos de prevaricación y odio y por "verter mentiras".

En un escrito remitido por Mabel Deu al Senado, el consejero de Educación y Cultura, Javier Celaya, ha recordado sobre lo sucedido en la ciudad que la calle recibió el nombre de Millán Astray el 31 de enero de 1939 "dentro de un acuerdo que afectaba a otras 28 vías". Su nomenclatura "obedece a un recuerdo como personaje de la historia local de Ceuta en un periodo anterior a la Guerra Civil toda vez que fundó en 1920 el Tercio de Extranjeros, hoy conocido como La Legión, unidad militar de prestigio internacional y que forma parte de las señas de identidad de la población".

Además, según remarca Celaya "entre 1928 y 1930 fue comandante general de Ceuta con enorme presencia en la ciudad". "Tanto es así", destaca, "que el 24 de enero de 1930 se le nombró Hijo Adoptivo de Ceuta. Durante la II República Española presidió la comisión organizadora del homenaje nacional al Grupo de Regulares de Ceuta y al Teniente Coronel Santiago González Tablas, gracias a lo cual consiguió instalar en Ceuta la estatua obra de Enrique Pérez Gobernador". En enero, el consejero ya había argumentado que tanto Millán Astray como Queipo de Llano "ostentaron altos mandos militares en Ceuta en periodos anteriores a la Guerra Civil española" y que el segundo fue, por ejemplo, distinguido con la Gran Cruz del Mérito Militar el 1 de julio de 1936.

La Ciudad respondió con ese argumentario a sendos requerimientos de información del senador de Compromís Carles Mulet, para quien Rocafort sí que tiene de todo y al que tacha de "jeta" y hasta de "verdulero" pero, sobre todo, de "aprovechar la Memoria Histórica" para "colapsar" la Cámara Alta "extralimitándose" con la "permisividad" y la "complicidad" del PP "que le deja hacer con ese hueso" y hasta de "chantajear" a decenas de Ayuntamientos "inmiscuyéndose en una competencia suya como la de nombrar calles".

"En los casos de pequeños municipios puede amedrentar recibir una carta del Senado exigiendo un cambio de nombre o amenazando con la Fiscalía pero algunos han rechazado sus misivas, que cuentan con la complicidad del PP y que ponen en riesgo la convivencia pacífica: que pregunten a los interesados, a los vecinos y comerciantes de las calles, y que dejen en paz al fundador de La Legión", ha reclamado Rocafort, que se ha congratulado por cómo "sienten" las ciudades autónomas a Millán Astray y por cómo han "defendido la verdad" de un militar "intachable desde el punto de vista castrense".