El contrato arranca este próximo año 2017 con una dotación de 3,6 millones de euros y continuará a lo largo de los años 2018, 2019 y 2020 con partidas de 4 millones por cada ejercicio y de 3,3 millones para 2021.
El contrato, que dará empleo a alrededor de cien personas, incluye retirada de escombros de vertederos ilegales y conservación y limpieza de monumentos, limpieza de jardines, parterres y limpieza vertical en acantilados y terraplenes.
Además, ha avisado Hachuel, desde ahora se vigilarán especialmente los solares y terrenos de propiedad privada en los que se acumulen escombros y advierte que los responsables subsidiarios del coste que su limpieza genere recaerá en los dueños.