Los líderes de Caballas, Mohamed Ali y Juan Luis Aróstegui, han interpretado este miércoles como un "delirio" la afirmación del presidente de la Ciudad, Juan Vivas, según la cual Ceuta está hoy "mejor que hace doce meses". El portavoz localista ha llegado a valorar tal frase como una "falta de respeto" a la ciudadanía cuando "todo ha ido a peor" según su punto de vista.

"La frontera está peor que hace un año, los polígonos lo mismo, el paro sigue como siempre, no hay planteamientos para atender la necesidad de vivienda, el fracaso escolar no mejora, con el transporte marítimo se ha plegado al monopolio de las navieras, la pobreza es la misma protagonista, el déficit de personal en la Administración a todos los niveles no se ha subsanado... No sé", ha criticado Ali, "en qué basa sus palabras el presidente más allá de su discurso".

El localista también ha recordado que el Ejecutivo local no ha iniciado "ni un proyecto" de los contemplados "en el Plan de Barriadas que iba a empezar a desarrollarse en 2015".

Hablando de obras, Aróstegui ha dejado claro a preguntas de los periodistas que el proyecto complementario que se pretende incluir en la rehabilitación de la Estación de Ferrocarril suena a un "atraco" que la coalición pondrá todos los medios a su alcance para que no se consume. "Este tema", ha contextualizado, "nos indigna especialmente porque hace un año planteamos que el contrato con Dragados, que tiene la obra parada desde 2011, se rescindiese y se nos dijo que no, que era mejor negociar". Desde entonces, de los 600.000 euros que reclamaba la constructora el Consejo de Estado dijo que solo había que abonarle "unos 80.000" y "ahora parece que lo que no han cobrado por un lado quieren recibirlo por otro".

Caballas calcula que dicho complementario absorbería "un mínimo de 500.000 euros" cuando "en el pasado se han hecho trabajos no contemplados, se han pagado facturas dos veces con el Fondo de Proveedores y se ha tenido que llegar a un pacto político con el Ministerio de Fomento para no tener que devolverle su cofinanciación del proyecto". "Esto es un escándalo mayúsculo", ha resumido.

El arquitecto municipal, Javier Arnáiz; los directores de obra, José González y María José Aranguren; el representante del constructor, Alejandro Morón; y el director de ejecución, Juan Antonio Zoido, han firmado un escrito en el que solicitan la redacción de un proyecto complementario tras solo desinfectar la obra, que sigue sin retomarse.

El dictamen apunta que es necesario "analizar la interferencia entre los acabados de solería, trasdosados, vierteaguas, suelos de mármol, alicatados, falsos techos e incluso carpinterías con la ejecución de las instalaciones", que "no están previstas" en esta fase del proyecto. Por si fuera poco "están asimismo pendientes de definir las acometidas de abastecimiento, electricidad y telecomunicaciones necesarias por las empresas suministradoras".

Además dice que ahora habría que trasladar la locomotora al interior del nuevo volumen pero que no está contemplado "ni el tratamiento de restauración ni la ejecución de la plataforma de apoyo definitivo". Cinco años después de su paralización "es necesario comprobar la estructura metálica, incluso su tratamiento contra incendios, y el elemento prefabricado de hormigón de fachada y cubierta".