Los convenios de la Ciudad con asociaciones y fundaciones de 2019 incorporarán una cláusula novedosa. La Consejería de Sanidad, Servicios Sociales, Menores e Igualdad prevé incluir en ellos un imperativo nuevo: que plantillas de trabajadores sean "equilibradas” entre hombres y mujeres. En la misma línea, la Administración se encargará se “supervisar” que “no existan situaciones de desigualdad entre mujeres y hombres en dichas asociaciones y fundaciones”.

Esa es la respuesta que piensa dar el Ejecutivo local al Acuerdo Plenario adoptado en marzo a propuesta de Ciudadanos para “implementar la fórmula más conveniente para obligar a las entidades subvencionadas por la Ciudad a conseguir en sus plantillas una representación equilibrada entre hombres y mujeres y a establecer actuaciones encaminadas a corregir situaciones patentes de desigualdad de hecho respecto de los hombres”.

Dicho pacto vino derivado de una propuesta presentada de la formación naranja encaminada a “obligar” a las entidades subvenciones por la Administración local a “conseguir en sus plantillas una representación equilibrada entre hombres y mujeres”. Lo que no ha precisado el departamento que dirige Adela Nieto es qué medidas suplementarias adoptará para conseguir el cumplimiento de esos requerimientos.

Las distintas Consejerías de la Ciudad mantienen de forma indirecta cientos de empleos a través de convenios por un importe millonario. Entre ellos destaca, por número de trabajadores, el de las Brigadas Verdes (más de 150 empleos a través de la FPAV).

La Ciudad Autónoma piensa exigir pero, al menos de momento, no da ejemplo pese a que el III Plan Estratégico de Igualdad de la Ciudad 2012-2016 tenía como objetivos “promover el principio de igualdad y las transversalidad de género en la política de la ciudad y en la organización laboral de la Administración” y “planificar programas y actuaciones integrales que mejoren la situación de igualdad de oportunidades entre hombres  y mujeres en empresas, instituciones y mercado laboral”.

Dos años después de expirr su vigencia, en la Administración, según el último dignóstico del Tribunal de Cuentas, “el porcentaje de mujeres sobre el total de empleados [31%] es, en todas las categorías, inferior al 40%, excepto en el personal laboral temporal, donde el porcentaje se sitúa en el 53%”.  Entre los altos cargos, el 15%.