El delegado del Gobierno en Ceuta, Francisco Antonio González Pérez, asiste este jueves en Melilla a una cumbre junto a sus homólogos del resto de Autonomías para expresar su "más sincero apoyo" a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "que cumplen con la obligación legal de defender las lindes fronterizas de Melilla y Ceuta y, por ende, las de la frontera sur de Europa".

El grupo también ha dejado patente su "solidaridad y apoyo" al pueblo melillense y a sus autoridades "en esta difícil etapa marcada por una extrema presión migratoria sobre la ciudad". "Melilla se nos ha revelado como una tierra abierta, intercultural y tolerante que hace honor a su título de 'muy hospitalaria”, han destacado en una declaración en la que también han agradecido "el espléndido recibimiento que se nos ha brindado".

"Sentimos y compartimos", han añadido los delegados, "el drama que está suponiendo la constante presión migratoria que, como bien dicen sus autoridades locales y nuestro homólogo en Melilla, no es un problema específico de la ciudad sino del conjunto de la Unión Europea". En esa coyuntura consideran "necesaria" una política "común" de inmigración "que fomente la cooperación con los países de origen, acabe con las mafias que trafican con seres humanos y ordene los flujos migratorios hacia Europa".

"La inmigración es fuente de riqueza y progreso, siempre y cuando sea legal y ordenada pero rechazamos de plano", han distinguido, "una práctica de inmigración basada en el tráfico de seres humanos, a merced de mafias sin escrúpulos que promueven los asaltos constantes a las vallas de Melilla y Ceuta con Marruecos, con fuerza e incluso violencia en muchas ocasiones".

Para los delegados "la inmigración ilegal es fuente de problemas, conflictos y marginalidad, y sólo sirve a quienes no dudan en lucrarse espuriamente de las aspiraciones de muchos inocentes que en su desesperación acaban protagonizando un tipo de inmigración al que, en ningún caso, debemos ni podemos resignarnos".

Su paso por Melilla ha querido ser "una muestra del apoyo y compromiso decidido del Gobierno de España con esta tierra tan querida por todos". "Los melillenses y sus autoridades tienen todo el apoyo y cooperación que puedan requerir para seguir avanzando por la senda de la interculturalidad, la tolerancia, el respeto y la convivencia ejemplar entre las distintas comunidades religiosas y culturales que conforman la ciudad", han concluido.