El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha comparecido este viernes tras el Consejo de Ministros ante los medios de comunicación. El máximo responsable de la Guardia Civil no cree que el informe publicado y elaborado por la oenegé Ca-Minando Fronteras en el que se afirma que existe relación “causa-efecto” entre el uso de material antidisturbios y el ahogamiento de 15 personas el pasado 6 de febrero en el Tarajal, cambie algo la situación.

“Mientras no se demuestre lo contrario, no hay ninguna razón por la que exigir responsabilidades. No hay relación causa-efecto”, ha atajado ante los periodistas.

“Mientras no se demuestre lo contrario, y hasta ahora no se ha demostrado, no hay relación causa-efecto entre la actuación de la Guardia Civil y esos fallecimientos que lamentamos, dramáticos, en aguas marroquíes. Por tanto, mientras no se muestre lo contrario, insisto, no hay ninguna razón por la que exigir responsabilidades”, ha reiterado Fernández Díaz.

Díaz ha abundado además en una de las principales tesis de defensa del Gobierno hasta ahora al recordar lo obvio que los inmigrantes querían “pasar ilegalmente” a la ciudad y “fallecieron en aguas marroquíes”.

En un asunto que, además, está subjudice y con el que el ministro ha apostado, ahora sí, por la transparencia al afirmar que todos los grupos parlamentarios van a tener acceso a toda la información sobre el asunto.

En el capítulo de las responsabilidades judiciales Fernández Díaz ha avanzado que a juzgar por lo que se ve en los vídeos y lo que se escucha en los audios puestos a disposición de la Justicia no se aprecia nada que pueda corroborar lo dicho por la organización Ca-Minando Fronteras y por tanto no comparte sus conclusiones.

La próxima semana comparecerá en la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, que será el encargado, precisamente de detallar toda la información a los grupos de la oposición. El ministro se ha mostrado convencido de que tras su intervención “quedarán aclarados todos los extremos relativos a la tragedia, donde la última palabra lo dirá la autoridad judicial”, ha afirmado.

Un gesto el de compartir toda la información con la oposición o el de hacer públicos los vídeos y los audios de la Guardia Civil de la madrugada de autos que el ministro ha puesto de ejemplo de transparencia. “No es la primera vez ni la última”, ha asegurado, que sucederá una tragedia y un intento de asalto a las fronteras de Ceuta y Melilla, pero “sí es la primera vez” que se facilita toda la información. Así ha recordado que en 2005 al Gobierno de Zapatero también se le requirieron los vídeos de la frontera y entonces no se hicieron públicos.

Unión Europea como solución

Fernández Díaz también ha aprovechado su comparecencia para abundar en la tesis de que el problema en la frontera no es exclusivo de España, dado que se trata a su vez de una frontera de la Unión Europea.

"Ceuta y Melilla también son fronteras exteriores de la Unión Europea y por tanto la Unión Europea se tiene que comprometer desde todos los puntos de vista en hacer frente a un problema que no es causado por España. No es España, y muchos menos en solitario, la que tiene que hacer frente al mismo", ha asegurado.

Díaz también se ha congratulado por la buena acogida de su oferta de pacto de estado en el seno del PSOE, que parece que finalmente dialogará con el Ministerio para tratar de que la inmigración sea de ahora en adelante tratada como un asunto de Estado y se evite hacer de ella una disputa política.

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