El Grupo Parlamentario Socialista instará al Gobierno local la próxima semana en el Pleno a crear un Plan de Movilidad Sostenible para de Ceuta estructurado en dos fases. La primera, "de implantación inmediata y coste cero", conllevaría la exención del pago del impuesto de tracción mecánica a los vehículos que usen energías renovables, así como la reserva de espacios de aparcamiento gratuitos tanto en superficie como en los parkings subterráneos de titularidad municipal para bicicletas y vehículos eléctricos de dos ruedas.

La segunda pasaría por la redacción propiamente dicha de un Plan "adaptado a la realidad ceutí y con medidas y plazos concretos para la consecución de los objetivos marcados". A tal efecto debería incluir "una consignación presupuestaria para incentivos a la compra de vehículos con energías limpias, creación de carriles verdes y/o específicos y cuantas medidas se entiendan necesarias".

Los socialistas apuntan a que, en Ceuta, los hábitos actuales de movilidad pasan por "una dependencia creciente respecto del vehículo privado que sumada el parque móvil existente en la ciudad y al proveniente diariamente desde Marruecos genera un gran consumo de espacio y energía y un impacto medioambiental que pone de relieve la necesidad de lograr un sistema de transportes urbano bien concebido que sea menos dependiente de los combustibles fósiles".

Los socialistas creen que hay que "habilitar recursos, implantar medidas y cambiar tendencias", lo que hace necesaria "la concienciación e implicación de toda la sociedad y las Instituciones para alcanzar soluciones integrales que supongan un cambio en la tendencia, hacia la sostenibilidad, en la movilidad urbana".

El PSOE cree que la propia Ciudad Autónoma "parece entender" esta obligación institucional cuando decide, a través de la Consejería de Medioambiente y Sostenibilidad impulsar la compra de 5 vehículos eléctricos por valor de 143.000 euros. Tal y como reza la justificación desde el propio Gobierno de la Ciudad “el vehículo eléctrico está llamado a formar parte de la movilidad sostenible en las ciudades, debido a sus beneficios en materia de eficiencia energética, ayudando a mejorar la calidad del aire en nuestras ciudades y a disminuir la contaminación acústica, favoreciendo además el consumo de energías de fuentes renovables”. Asimismo, consideran preciso recordar que Ceuta cuenta con una estadística de 3.000 vehículos por kilómetro cuadrado, mientras que la media nacional es de 50 vehículos por kilómetro cuadrado.

El Grupo Parlamentario Socialista cree que Ceuta "no debe contentarse con este tímido paso, sino que debe apostar de forma ambiciosa por un Plan de Movilidad Sostenible" y, "al igual que en muchas ciudades españolas y europeas", no quedarse "al margen del esfuerzo por generar prácticas más eficientes y saludables de movilidad urbana".

Aglomeraciones y atascos "cada vez más frecuentes"

"Nuestra ciudad sufre cada vez más frecuentemente aglomeraciones y atascos de tráfico y nuestra aportación a rebajar los niveles de contaminación atmosféricos es prácticamente inexistente y a esto hay que añadirle la carestía de plazas para encontrar aparcamiento en ciertas zonas, efecto este que provoca aún más congestiones en horas punta", han destacado desde Daoiz.

Incluso Melilla cuenta ya con su propio plan apoyado en "un modelo de movilidad basado en la jerarquización del espacio viario, la interconexión entre barrios y entre estos y el centro urbano; así como en criterios de intermodalidad y en una concepción de los desplazamientos diarios en distintos medios de transporte".

Los socialistas indican que, en nuestra ciudad, existen documentos de partida donde se recaban datos y analizan medidas en este campo como son los elaborados en 2003 por PROCESA y en 2008 por el Observatorio de Sostenibilidad de Ceuta y Melilla de 2008, por lo que parece sensato que más de una década después, las instituciones arranquen por fin con un ambicioso plan de movilidad sostenible para nuestra ciudad que incluya las conclusiones de los referidos estudios, los datos y criterios aportados por los técnicos de las diferentes áreas, los estudios sobre el impacto del ruido, las nuevas tecnologías que fomentan la sostenibilidad, los planes urbanísticos y la proyección futura que deseamos de nuestra ciudad.