La senadora ceutí Luz Elena Sanín ha calificado este martes de "necesidad social" el anteproyecto de Ley de interrupción del embarazo que propugna el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón. Según ha subrayado, "un ser humano lo es desde la concepción y no se le puede llamar ni planta ni otra cosa porque tiene alma y vida y sufre en el vientre de la madre". Según la parlamentaria del PP "no se puede promocionar el aborto libre" y debe incidirse en la "educación en valores" a los jóvenes "para evitar quedar en embarazos". Eso se puede lograr "inculcando unas medidas eficaces para evitar unos efectos que pueden dañar física o psicológicamente" a las mujeres encintas.

Desde la óptica de la ceutí, la ley de plazos de Zapatero de 2010 "ha multiplicado los abortos" en España [las últimas estadísticas oficiales aseguran que ese año se practicaron 113.031 y que en 2012 se registraron 112.390] e introdujo un pecado mayor: "Una menor", ha argumentado, "jamás puede abortar sin conocimiento de sus padres y si le están vetados otros derechos no se puede abrir la veda para eso".

"La libertad de la mujer en este sentido más que un derecho es una libertad por grave daño para su salud o por violación", ha ampliado Sanín, quien ha recordado que en la Constitución "el artículo 15 protege la vida del no nacido y el 10 también es muy claro sobre la protección de la dignidad de la mujer, que hay que hacer valer como un principio jurídico de primer orden".

Así, ha enmarcado el debate en una "contraposición entre el derecho a la vida y a mantener la dignidad" en el que "hay que valorar cada caso, la incidencia en la madre de esa violación, y ahí determinar la posibilidad de abortar o no". "La violación es el desgarro mismo de la dignidad de la mujer, es como si le hubiera roto el alma, y entonces hay que darle todo el apoyo psicológico, sanitario y económico para que su primera decisión no sea abortar", ha añadido.

"Vamos a volver a la legislación de supuestos de 1985"

Para Sanín una mujer violada "es una víctima de la sociedad y del proceso abortista, por el que también puede sufrir traumas". A renglón seguido, ha recordado que algunas mujeres han preferido dar en adopción hijos antes que interrumpir un embarazo.

La senadora ha aseverado que con el texto de Gallardón "vamos a volver a la legislación de supuestos de 1985, que se mantuvo con Aznar y que se mantendría si el PSOE no hubiese introducido los cambios de 2010", y ha obviado que el anteproyecto del ministro prevé prohibir la interrupción por malformaciones del feto y endurecer los requisitos para quienes aleguen motivos de salud hasta requerir más de una autorización médica para dar fe de que están en riesgo.

La parlamentaria del PP ha llegado a decir que en España se han destinado 85.000 millones de euros, el equivalente al rescate económico aprobado por la UE en 2010 para Irlanda, al "negocio" de "las clínicas abortistas".