El Consejo Territorial de Unión Progreso y Democracia (UPyD) en Ceuta ha "lamentado" este jueves en un comunicado no haber sido invitado por la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) al debate sobre Educación que tendrá lugar a partir de las 19.00 horas en el Salón de actos del Palacio autonómico y en el que participarán representantes de PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos.

"Lamentamos que un debate sobre la política educativa en la ciudad promovida por un órgano independiente se haya realizado de forma arbitraría dejando sin voz a UPyD, el cual en esta legislatura ha gozado de grupo parlamentario propio", ha señalado la formación que encabeza Julián Domínguez.

La formación magenta cree que "la ciudadanía debería poder escuchar libremente todas las opciones políticas y por ello no entendemos que para hablar de educación solo se haya dado la oportunidad a los partidos que representan el nuevo 'bispardismo' sin tener presente de la misma manera alguna voz relacionada con el colectivo docente fuera del ámbito político".

No obstante, el partido ha querido dar a conocer sus propuestas para una ciudad que, junto con Melilla, " comparte las tasas de fracaso escolar más altas del país. Una ciudad donde el colectivo docente se ha visto reducido en casi 100 personas desde el año 2011, mientras que las ratios aumentan por la tasa de natalidad positiva".

"Ceuta se ha visto maltratada por el Ministerio de Educación y el Foro ha pasado a ser un mero ente figurativo sin función ninguna", ha señalado UPyD en un comunicado en el que también ha criticado que los centros educativos "han visto reducidas sus aportaciones hasta el punto de que muchos de ellos no saben con qué dinero van a contar a lo largo del curso escolar" y que "numerosos programas están paralizados a expensas de lo que ocurra en estas elecciones".

UPyD apuesta por forjar un pacto educativo en el que "los docentes sean los verdaderos protagonistas del mismo, terminando de una vez por todas con leyes realizadas por personas que no han pisado nunca un centro educativo" y por "la recuperación de las competencias educativas por parte del Estado, dejando solo la gestión de las mismas para las Autonomías".

Cambiar la selección del profesorado

También aboga por "un curriculum más realista y adaptado al alumno con la reducción del número de asignaturas y una aprendizaje basado en el trabajo global del alumno y no en horas lectivas" y por "desarrollar la cultura del esfuerzo, potenciando también los programas de apoyo y diversificación".

Reclama proyectos curriculares "fijados por la administración educativa, excepto en casos excepcionales, realizando a su vez una evaluación externa de forma periódica" y que en la enseñanza concertada la elección del profesorado se haga "por sistemas de concurso similares a la educación pública y control riguroso de la gratuidad real de estos centros".

"Profesionalizar la gestión de los centros"; suprimir la actual forma de selección del profesorado "sustituyéndola por un sistema parecido al MIR Sanitario, con un periodo de uno o dos años de prácticas"; establecer un programa nacional de ayudas para comedores escolares y un sistema de prestamos gratuitos de libros de textos y otro material educativo gestionado por los propios centros escolares; potenciar la Primaría "como la base de conocimiento de la Secundaría" y "crear centros de referencia de Formación Profesional por familias profesionales" son otras de sus propuestas.

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