Camioneros que responden al principal líder sindical argentino, el peronista Hugo Moyano, bloquearon ayer sedes de distribución de los dos periódicos de mayores ventas en Argentina,
Clarín y La Nación. El Sindicato de Camioneros, que controla uno de los hijos de Moyano, Pablo, alegó que reclamaba un aumento salarial y la afiliación de todos los chóferes y auxiliares que trabajan en los vehículos que reparten los diarios. Diputados de la oposición relacionaron los incidentes con la reyerta entre el Gobierno de Cristina Fernández y los grandes medios de comunicación.