Comisiones Obreras, que prepara una respuesta más detallada al director territorial, Fernando Pérez Padilla, sobre el que mantiene la petición de cese, ha desmontado este jueves el incremento de plantilla de Ingesa anunciado el miércoles por Padilla. Según Ingesa en enero de 2011 había 913 efectivos y en enero de 2013, 1.012. Si bien, según ha advertido este jueves el secretario general de la Federación de Sanidad de Comisiones Obreras, Ángel Lara, en marzo de 2011 los trabajadores del Ingesa eligieron a 23 delegados, lo que significa que había trabajando en febrero de 2011 más de 1.000 personas, “al menos 1.001”, si hubiera 999 se habrían elegido 21 delegados, tal y como marca el Estatuto Básico del Empleado Público.

Dicho de otro modo, la duda es si lo que facilitó ayer Pérez Padilla no era sino la plantilla orgánica, que los propios sindicatos han reconocido al alza, para centrar sus acusaciones de pérdida de efectivos en la falta de coberturas de bajas, de decesos, excedencias y la reducción de contrataciones al margen del dictado de plantillas orgánicas, recorte reconocido por el propio Padilla en noviembre de 14.500 jornadas, unos 40 efectivos.

Lo que ayer miércoles era con rotundidad una cosa, hoy jueves ya no lo es y es otra. Ingesa había prometido para este jueves facilitar el dato en euros de lo que marcó el presupuesto para Ceuta en recursos humanos al inicio de cada curso entre 2011 y 2013 para poder cruzarlo con el que supuestamente era el gasto real en materia de personal, el que facilitaron el miércoles a la prensa. El que han dado este jueves es un desglosado y detallado mes a mes y por artículos gasto real, y el que dieron el miércoles es el gasto que había presupuestado al inicio de cada ejercicio.

No cambia gran cosa, salvo la evidencia de que Pérez Padilla no sabía demasiado bien de lo que hablaba. “Eso es el gasto real, lo que nos hemos gastado en personal cada año”, aseveró sobre las cifras facilitadas, cuando eran en realidad lo que figuraba en el presupuesto al inicio del curso, según ha aclarado Ingesa este jueves.

Así, en 2011 se presupuestó en gastos de personal 32,45 millones de euros sin incluir los costes de Seguridad Social y finalmente se gastaron 33,78 euros. Se gastaron 1,3 millones de euros más de lo presupuestado inicialmente. En 2012 se proyectó un gasto de 34 millones de euros y se gastó al final 34,65 millones. Y en 2013 esa fue la cantidad presupuestada 34,6 millones y se gastaron al final 35 millones de euros. Desviaciones escasas de entre 1 y y el 4 por ciento. Pero desviaciones al fin y al cabo en el capítulo de personal sobre el que Pérez Padilla dijo esto el miércoles al ser preguntado por las cantidades presupuestadas cuando hasta el mismo creía que las facilitadas eran el gasto real:

“Le puedo decir que no se ha devuelto nada. Porque el capítulo 1 es un capítulo cerrado en el que no hay posibilidad de incrementar el gasto ni disminuirlo; menos aún disminuirlo. Disminuirlo es imposible ¡Imagínese usted un trabajador al que no se le paga la nómina! Sólo cabría la posibilidad de incrementarlo produciendo una desviación en lo presupuestado y tendríamos que justificarlo. En cualquier caso no se puede gastar menos, si se gasta menos es que no se puede… Sería no pagar las nóminas. Es cerrado y no admite cambios”, dijo Padilla.

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