El 3 de junio se registró el último caso positivo en la Ciudad Autónoma de Ceuta. Desde el pasadlo jueves, Ceuta no tiene tampoco casos activos ni tan siquiera casos sospechosos bajo seguimiento y desde hace ya más de una semana no hay tampoco pacientes COVID-19 hospitalizados. Doce días y medio después, la ciudad entra en la fase 3, la última de la desescalada antes de la vuelta a la normalidad relativa, en la mejor de las situaciones posibles, a dos días de poder confirmar que Ceuta está libre de coronavirus, una vez que ha ya pasado el periodo de incubación del virus de 14 días. 

Un buen escenario, de cara a la desactivación del estado de alarma, pero ante el que el director territorial de Ingesa, Jesús Lopera, insiste que hay que mantener “la alerta”. “Hay que extremar las medidas de seguridad, no podemos pensar que por el hecho de que estemos en fase 3 y próximamente en fase de normalidad haya que dejar de hacer las medidas que venimos insistiendo”, avisa Lopera, recordando que “en cada fase de la desescalada ha habido un brote”.

“La incidencia y la prevalencia son bajas eso quiere decir que se está haciendo bien pero el virus sigue ahí y debemos seguir alerta”, ha subrayado insistentemente en una nueva comparecencia que, de nuevo, pese ala desescalada, se ha realizado de forma telemática sin presencia de periodistas, que han seguido la intervención por la retransmisión de RTVCE.

Lopera ha querido remarcar que tanto la unidad d rastreo como Medicina Preventiva y Atención Primaria siguen en alerta, pese a que en la actualidad no hay ni tan siquiera casos sospechosos. En la última semana, pese a no haberse registrado casos, Ingesa ha llevado a cabo 280 PCR y 351 test.