La inquietud ha sido la nota predominante en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) ante la detención de los inmigrantes que entraron durante la mañana de este miércoles en Ceuta  usando objetos punzantes, cal viva y ácido contra los agentes de la Guardia Civil. Una inquietud que se ha vuelto alarma ante la expulsión de los 116 protagonistas del salto produciendo una desbandada de muchos de los residentes.

El miedo a que las expulsiones se extiendan a todos los que han entrado irregularmente en la ciudad se ha extendido y algunos de los residentes habrían abandonado el centro visiblemente nerviosos e indignados, sin que sea posible precisar el número al tratarse de un centro abierto. Acogidos consultados por Ceuta al Día confirman la “crispación e inquietud” que se vive entre los usuarios, pero niega que haya intención de abandonar el CETI. Las singulares características de Ceuta, sin escapatoria posible salvo colarse en un ferry, hace inútil una huida de las instalaciones del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes.

SALIDAS HACIA EXTREMADURA

En paralelo, el  Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes prepara la salida hacia la Península de cien acogidos más, todos varones, a las 07.30 horas de la mañana, con destino a organizaciones no gubernamentales de Extremadura. Sería la segunda salida de inmigrantes en 48 horas, quedándose en las instalaciones un millar, aún casi el doble de su capacidad, limitada a 512 plazas.