El programa especial de vigilancia en las playas de Ceuta que desde este jueves ha puesto en marcha Gobernación en la ciudad autónoma se ha saldado con cuatro denuncias por consumo de estupefacientes, tres más por venta ambulante de pasteles y frutos secos sobre otros tantos 'vitamina' y otra contra un inmigrante por la distribución de discos ‘piratas’ entre los bañistas acusado de un presunto delito de entrada ilegal en España y una supuesta falta contra la propiedad intelectual, según ha precisado este viernes a través de un comunicado el Ejecutivo de Vivas.

La erradicación de la costumbre de “fumar porritos” en la costa durante el periodo estival es uno de los objetivos prioritarios de la campaña iniciada por la Consejería de Bel, según destacó este jueves el superintendente de la Local, Ángel Gómez, en el acto público de presentación de la iniciativa.

“Los incidentes que se producen”, apuntó el mando policial, “suelen ser hurtos al descuido cuando el bañista deja el bolso, el móvil o la toalla sin vigilancia; pequeñas peleas entre jóvenes y grupos que se fuman sus porritos en las playas porque es un sitio muy adecuado, al sol, que les produce una sensación muy especial, pero desde luego eso se va a erradicar totalmente”.

“Aquí no se va a permitir que se consuman estupefacientes y se va a proteger al ciudadano de todas las actividades que son ilícitas”, advirtió Gómez sobre el trabajo de los 13 policías destinados a las playas, que también tienen como misión impedir que se corra o se juegue con pelotas o palas en la arena para evitar que se “moleste” al resto de usuarios.

Según Bel, la presencial policial en las playas “es necesaria porque es un síntoma de seguridad que da garantías y tranquilidad al bañista y al ciudadano como ninguna otra puede hacer”. “Después del éxito del año pasado en cuanto al reconocimiento de la ciudadanía, no había ninguna duda de que el Cuerpo debía seguir este verano en el litoral para asegurar comportamientos cívicos y ordenados”, ha resumido.

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