El 1 de mayo en el siglo XXI no es ya patrimonio exclusivo del sindicalismo y el proletariado. El 1 de mayo en 2019 en Ceuta ha sido además feminista, ecologista y antifascista. En torno a cuatrocientas personas han secundado la convocatoria de marcha desde la plaza de la Constitución a la plaza de los Reyes con un objetivo prioritario, pero no el único: lanzar un mensaje al Gobierno socialista para que deroguen la reforma laboral y la reforma del Estatuto de los Trabajadores. “Con este Gobierno podemos hacerlo”.

“Ceuta no puede seguir siendo la ciudad del paro. Ceuta sigue siendo la ciudad que no da oportunidades a los jóvenes, ese debe ser el primer objetivo del Gobierno, no puede seguir igual”, reclamaba un año más Juan Carlos Pérez, secretario general de UGT en Ceuta. “Las urnas son importantes, con las urnas se cambian las políticas y se cambia el sentido de las cosas”. Arenga al que el público, principalmente el colectivo de parados respondía unánime con el lema “sí se puede”.

“Abrimos un nuevo escenario y le decimos al PSOE”, advertía Juan Luis Aróstegui, secretario general de Comisiones Obreras, “no nos vayas a traicionar. Todos os hemos apoyado y lo hemos hecho convencidos de que este país necesita un Gobierno que asuma la igualdad y la justicia social como prioridades. Y se lo vamos a exigir un día y otro y otro, hasta que deroguen la reforma laboral”

Para el secretario general de Comisiones Obreras, la precariedad y el paro tienen su origen en un país en el que la derecha tanto la política como la económica ha tenido una hegemonía que nos ha destrozado, nos han arrebatado nuestros derechos, han impuesto salarios miserables y han desprotegido a los trabajadores, convirtiendo el mercado laboral eun yermo y esto lo sufren millones de compatriotas, miles y miles de ceutíes, personas que encadenan contratos temporales sin derechos, personas que van al paro y regresan tarde mal o nunca. Víctimas de una política injusta que tenemos que revertir. Y para eso necesitamos la lucha en la calle”. Desde CCOO apuestan por una actitud “combativa permanente” para “no condenar a las próximas generaciones  sean esclavos del siglo XXI”.

Contra la ultraderecha

No era el único aviso, la única alerta que lanzó el líder de CCOO en la marcha del 1 de mayo: “Hay que combatir a la extrema derecha, no vale ser tibios, ni ponerse de perfil, ni mirar para otra parte ni lamentarse”. Para Aróstegui “ es una tragedia para esta ciudad, no se puede consentir que la extrema derecha marque las pautas de vida en Ceuta, es un problema para esta ciudad que tenemos la obligación de combatir, día a día, en la calle, en casa, en el trabajo”.

Contra el machismo

El movimiento obrero de siglo XXI no se olvida de las mujeres. “Queremos garantías de igualdad real entre hombres y mujeres”, reclaman, remarcando el “real” y recordando el peligro que supone la ultraderecha: “Hemos asistido estos meses al posiciones de sublimación del machismo que creíamos enterradas. Hay que reforzar las políticas de género a través de una educación transformadora d ele perspectiva de género, desarrollarla Lay de Igualdad y de Violencia de género en su integridad para que las mujeres se libren de la violencia machista que las atenaza y aterroriza. Romper los techos de cristal, conseguir la igualdad salarial y cavar con la segregación de la mujer en el mercado laboral. Queda mucho por hacer para conseguir la igualdad real y efectiva”.

Contra el cambio climático

El manifiesto del 1 de Mayo de este 2019 no se quedó ahí, abriendo su mirada a la lucha contra cambio climático, que, avisan, “está aquí y si no hacemos nada hoy nos vamos a arrepentir mañana”. “No tenemos un planeta B, no tenemos otra tierra, señoras y señores”.