CCOO ha denunciado públicamente este jueves a través de una nota a los medios que "una conocida empresa ceutí de perfumería [que no ha mencionado por su nombre, aunque el caso es el mismo que también ha deplorado UGT]" ha despedido a una trabajadora que previamente había denunciado al empresario por acoso, ya que una ocasión le dijo que 'a mí me ha costado mucho dejarte fija por ser mora'. El sindicato ha explicado que la empleada llevaba 17 años al servicio de la empresa y que "desde hace años venía soportando un trato despreciativo y desconsiderado por parte del empresario, que se acentuó cuando la empleada fue dada de baja médica por padecer un embarazo de alto riesgo".

"La presión que tuvo que soportar la trabajadora la obligó a ponerse bajo tratamiento psicológico, lo que motivó otro proceso de incapacidad temporal y esto, a su vez, empeoró aún más la actitud del empresario hacia ella", ha reseñado la central.

La situación derivó en una denuncia de la empleada ante el Juzgado de lo Social de Ceuta "por acoso laboral". La sentencia no estimó la demanda "al no probarse el carácter reiterado y sistemático de la actuación empresarial destinada a minar la autoestima de la trabajadora" pero "dejó sentada la existencia de hechos reprobables del empresario, así como discriminatorios, algunos de ellos por cuestión de raza o religión".

Con posterioridad, la trabajadora solicitó reducción de jornada por cuidado de hijo menor, con reducción proporcional de las retribuciones.

Al amparo de la reforma laboral, "que facilita y abarata el despido de los trabajadores", el empresario, "aduciendo pérdidas económicas y disminución de los ingresos en un 20% con respecto a los años anteriores, ha procedido al despido de tres trabajadoras, el 40% de su plantilla. "Entre ellas se encuentra la única trabajadora de religión islámica perteneciente a la plantilla fija de la empresa, a pesar de que había otras con menor antigüedad y mayor salario que ella", ha señalado CCOO.

La trabajadora ha presentado demanda por despido nulo o subsidiariamente improcedente ante el Juzgado de lo Social "al entender que el empresario ha procedido de forma discriminatoria a su despido por su condición de musulmana".

CCOO ha querido dejar claro que "deplora" cualquier comportamiento "racista" del empresariado local y ha anunciado que utilizará "todos los medios legales a su alcance para evitar cualquier forma de discriminación laboral que se base en criterios de raza, nacionalidad o religión, como en este caso".

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