“Sin palabras” y con “mucha gratitud” ante el comportamiento de sus convecinos, el presidente del Banco de Alimentos de Ceuta, Pedro Mariscal ha hecho recuento a última hora de la noche de este sábado de cómo había marchado el día de la Gran Recogida en Ceuta. “A estas horas hemos llegado ya a los 40.000 kilos”, ha certificado.

La cifra supera con creces a la de hace un año, cuando al cierre de la jornada andaban entre los 20.000 y los 27.000 kilos. Aún quedan cajas por recoger de las tiendas, lo que hace pensar en que la cifra final de lo que va a entrar en la despensa engordará en los próximos días.

“El techo que tenemos es imposible de superar. Hemos ampliado tiendas este año y lo que hemos recogido de más en algunos supermercados lo hemos recogido de menos en otros”, ha analizado Mariscal.

“¡Cómo ha colaborado todo el pueblo de Ceuta!”, se ha seguido sorprendiendo Mariscal. “El primer objetivo que nos marcamos fue el capital humano, queríamos 160 voluntarios y hemos tenido que parar nosotros en 220 y decirle a algunos que si no les importaba los íbamos a llamar pero no para hoy, sino para clasificar los alimentos y permitir una salida ordenada del almacén, aún nos queda muchísimo trabajo por hacer”, ha explicado Mariscal.

Las personas y las propias tiendas se han volcado permitiendo trabajar con comodidad y facilidad a los voluntarios de la entidad humanitaria.

Al Banco de Alimentos le quedan ahora otras campañas por desarrollar, si bien la solidaridad recogida este sábado crece, lo ha hecho en el último año hasta doblarse las necesidades de los usuarios del Banco de Alimentos.

“Estamos saliendo de la crisis, parece, pero no se nota en los hogares y estos días he podido observar que el ciudadano antes no miraba el céntimo y ahora sí, es como si hubiera miedo tras todo lo que ha pasado”, ha apuntado Mariscal.