A falta de multitudes, la primavera decidió unirse a la celebración del Domingo de Resurrección, a cuyo paso acompañaron unos cientos de ceutíes en el que es el punto final de una Semana Santa marcada por el buen tiempo, con la desafortunada excepción del Viernes Santo; los cambios de recorrido obligados por las obras de la Gran Vía y una nueva y más íntima carrera oficial, y que se ha visto salpicada por la polémica en su recta final, con la dedicatoria de la última ‘levantá’ de las Penas al ex profesor de San Agustín investigado por pornografía infantil, corrupción de menores y abusos sexuales.

La imagen del Santísimo Cristo del Triunfo asomaba por la puerta lateral de la Catedral podo después de mediodía y con él unos pocos cientos de fieles para recorrer por última vez esta Semana Santa la Plaza de África y la calle Pepe Serón, desfilar una vez más a lo largo del Paseo de las Palmeras hasta la Plaza de la Constitución, donde la comitiva continuó por el Paseo del Revellín, Padilla y Paseo Colón para entrar en la carrera oficial en torno al filo de las dos del mediodía. Última carrera oficial de una Semana Santa con menos público que en años anteriores.