La Asociación de Estudiantes de Educación Social de Ceuta ha aprovechado este miércoles, Día Internacional de la Educación Social, para reivindicar el "valor profesional y social" de un perfil "clave en la lucha por la reducción de las desigualdades y el progreso entendido como la construcción conjunta de una sociedad más justa, donde se respete la dignidad y se vele por el bienestar de las personas".
En un acto que ha incluido la lectura de un manifiesto y un desayuno solidario cuya recaudación será donada a Elín, los concentrados han puesto de relieve que la Educación Social "se presenta como elemento clave para salvaguardar desde la acción socio-educativa la dignidad de las personas, un derecho que nos pertenece".
"A día de hoy", ha lamentado el texto del manifiesto, "la Educación Social, a pesar de sus casi 30 años de historia y de surgir como respuesta a las necesidades concretas de la sociedad en estas últimas décadas, sigue sin ser una profesión plenamente reconocida, aun dando voz a la ciudadanía y generando contextos de diálogo y participación reales que posibilitan, entre otras cuestiones, la convivencia".
Según han advertido profesionales y estudiantes, "sin un marco legislativo que respalde nuestra labor, no habrá posibilidades de desarrollarla desde plenitud profesional y social". "Debemos fomentar y participar en la construcción de una nueva política que no sea refugio de valores insolidarios frente a un escenario en el que los derechos fundamentales de las personas se vulneran sistemáticamente: por ello", ha terminado, "hemos de velar por que la Educación Social se inserte en los diferentes escenarios sociales y políticos, garantizando unas políticas de bienestar que permitan el pleno desarrollo de las personas".
El secretario de la asociación, Ramsés Mohamed, ha profundizado en declaraciones a los medios en la conveniencia de ajustar las ofertas de empleo a los distintos perfiles y capacidades que atesoran los maestros y los educadores sociales, a los que la Ciudad Autónoma ha venido englobando en una misma categoría hasta ahora, aunque en el último Pleno se acordó hacer convocatorias más específicas y diferenciadas en función del trabajo a desarrollar en cada caso para no dar pie a situaciones de "intrusismo".