Entrevista de trabajo

-Mira, yo soy médico. Tú sabes que soy médico, ¿no? Y además gestioné hospitales en la montaña. Estoy hecho para este trabajo. Y yo lo valgo, porque sé de ser mano derecha del que manda, ¡tela! Lo fuí muchos años, allí en la sierra.

Y me gusta mucho la música y el arte en general y lo mismo monto conciertos que promuevo la paz que monto una edi- torial y hago una revista que organizo un curso que compro cuadros que por aquí y por allá, tú me entiendes ¿no? Un huevo frito y una corbata. Vamos... ¡Un artista! -Pero Paco, hijo, tú sabes que tú y yo somos amigos desde hace tiempo, que estudiamos juntos y que ya trabajas para mí. Aún te rige, ¿no? Yo sé que eres una buena persona. Pero Ese puesto no es para jugar a la política, es para pasar consulta y ahí estarás aislado del mundanal ruido. -El caso es que me gustan los niños, pero también los ancia- nos y el arte en general... Que yo soy médico. -Mira Paco, a ver cómo te lo explico, esto. ¿No va a ser un poco descarado?

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