Inmaculada Pilar Gracia

Mientras en Francia se acaba de aprobar una ley que establece la obligatoriedad de contar con la presencia de la bandera francesa, así como de la letra del himno nacional en todos los colegios, en España resulta que manifestarse en la calle pidiendo elecciones y ondeando nuestra bandera es un acto “fascista”… Los ocho meses del gobierno franquenstein del PSOE y la infame política territorial del Sr. Sánchez, amén de la persistencia en atacar a España de los independentistas, han conseguido que la mayoría de los españoles hagamos lo que hace cualquier país: unirse entorno a los símbolos nacionales y defender la unidad territorial y la igualdad de derechos entre todos los españoles y además sentirnos orgullosos de ello. Cuando tenía unos 15 años tuve ocasión de vivir un 14 de julio, día de la fiesta nacional francesa, en un pequeño pueblo del sur y ver como en una verbena se comenzó cantando solemnemente la Marsellesa, su himno nacional, mientras la orquesta lo tocaba. Aún recuerdo como me impresionó esa visión y  cuanta sana envidia sentí.

El nacionalismo territorial, transformado en los últimos años en independentismo supremacista, delirante y delincuencial en Cataluña, no ha surgido por generación espontánea.  Hay dos hechos claros que lo han alentado hasta el punto que “de aquellos barros, estos lodos”. Por una parte ha sido alentado por las necesidades de gobierno del pernicioso bipartidismo del PP y PSOE

El nacionalismo territorial, transformado en los últimos años en independentismo supremacista, delirante y delincuencial en Cataluña, no ha surgido por generación espontánea.  Hay dos hechos claros que lo han alentado hasta el punto que “de aquellos barros, estos lodos”. Por una parte ha sido alentado por las necesidades de gobierno del pernicioso bipartidismo del PP y PSOE que ofrecieron de todo a los independentistas para sacar adelante gobiernos débiles en Madrid. La conducta del PSOE desde que arribó a la Moncloa Pedro Sánchez es un vergonzoso claro ejemplo de lo que expongo: a cambio de mantenerse diez minutos más en el poder estaba dispuesto a negociar la integridad territorial del estado; o consintió el cuponazo vasco, o que la Alta Inspección Educativa no investigara la sectaria forma de educar a los catalanes…

El otro hecho sobre el que bascula lo que yo vengo a denominar “catasunismo”, es la Ley Orgánica Electoral General que es de 1985, y que diseña un sistema electoral para favorecer la creación de mayorías que pudieran soportar gobiernos estables que ayudaran a consolidar la democracia en nuestro país, porque permite la obtención de la mayoría absoluta de los escaños con tan solo el 35% de los votos de una circunscripción. Al aplicar el límite del 3% del voto para acceder al reparto de escaños conforme a la ley D’Hont solo a la circunscripción provincial se permite que partidos minoritarios tengan acceso al congreso por concentrar a su votantes en determinadas provincias; de tal forma que partidos regionalistas o independentistas tienen acceso a una cámara como el Congreso, que no es de representación territorial sino nacional…

Ambos partidos son los responsables de la situación actual y también del resurgir de partidos como VOX que como todos los populismos, sean del signo que sean, aprovecha el descontento social para vendernos “motos” fáciles de comprar y, en el caso de éste partido, para apropiarse de la simbología nacional que nos pertenece a todos

Ciudadanos presentó una modificación de la Ley Electoral para que esos partidos minoritarios no consiguieran representación nacional y así conseguir que dejaran de chantajear al resto de los españoles, pero tanto PP como PSOE la vetaron, pese a que con esa sola modificación se acabaría con esa intolerable e injusta situación. Ellos sabrán porqué la rechazaron… Por cierto que la Ley Electoral otorga solo un diputado a Ceuta y Melilla, mientras que por ejemplo a Soria, con la misma población, le otorga dos… Sin duda  modificar esta ley también es de justica para los ceutíes. El gobierno local del PP poco o nada ha hecho para pelear en Madrid en este sentido durante sus casi dos décadas de mayoría absoluta.

Nuestro ordenamiento jurídico tiene además una potente herramienta de autodefensa, al igual que los países de nuestro entorno, cual es el art. 155 de la Constitución, conforme al cual el gobierno central puede intervenir una autonomía cuando ésta  “…no cumpliere las obligaciones que la Constitución u otras leyes le impongan, o actuare de forma que atente gravemente al interés general de España…”. Pero  el PP  no hizo buen uso de este artículo, porque dejo de controlar asuntos claves, como la educación o los medios de comunicación, que son dos vías esenciales de adoctrinamiento; y además lo cerró definitivamente en falso. No es de recibo que el  Sr. Casado diga ahora que lo aplicarán si llegan al poder cuando pudo mantenerlo el tiempo necesario y no lo hizo…Por su parte el PSOE  ni se planteó volver a aplicarlo porque entiende que no hay razones para ello…

Ambos partidos son los responsables de la situación actual y también del resurgir de partidos como VOX que como todos los populismos, sean del signo que sean, aprovecha el descontento social para vendernos “motos” fáciles de comprar y, en el caso de éste partido, para apropiarse de la simbología nacional que nos pertenece a todos. Especialmente llamativa para nuestra ciudad es “la moto” que nos venden de que ellos, si gobernaran, meterían a los MENAS en centros cerrados. Se les olvida el detalle de contar  que existen leyes como la del Menor y la de Extranjería, y normas internacionales que deben cumplirse y que no permiten hacer guetos para niños ni para nadie.

En breve iniciamos un maratoniano proceso electoral “gracias” al marrullero e hipertrofiado ego del Dr. Sánchez que le impidió ser  coherente con la moción de censura y convocar elecciones “al día siguiente”. Parece que ningún partido político podrá gobernar en solitario por lo que concentrar el voto, en términos de resultar “mas útil” a la hora de adjudicar escaños, será decisivo para vislumbrar que partido y qué visión política acabe ostentando el gobierno del nuestro país.