El presidente Pedro Sánchez celebra este sábado a las 10.30 horas en un Consejo de Ministros extraordinario y excepcional por muchos motivos: será por videoconferencia y para decretar el Estado de Alarma. La medida contempla medidas drásticas y excepcionales que pueden limitar durante 15 días el movimiento de personas y el transporte público, así como el cierre obligatorio de comercios, salvo alimentación, para hacer frente a la propagación del coronavirus. 

Ceuta amanecía vacía, como tantos días, pero con una extraña sensación de irrealidad flotando en el ambiente. Una sensación que como un escalofrío recorre este sábado toda España, ala espera de las medidas que adoptará este sábado el Gobierno de Pedro Sánchez en Consejo de Ministros extraordinario en la declaración del Estado de Alarma.  Es la segunda vez que se toma esta medida en democracia tras la huelga de controladores aéreos, pero las circunstancias son totalmente distintas. 

Así se lo adelantó este viernes el propio Pedro Sánchez al presidente de la Ciudad, Juan Vivas, en conversación telefónica y así lo anunciaba el Gabinete de Comunicación de la Ciudad:  “El presidente Vivas ha mantenido esta tarde una conversación telefónica con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien le ha anunciado que este sábado, día 14, está prevista una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros en la que se adoptarán medidas drásticas para toda España, ante el avance del COVID-19”. Y ya por la tarde, desde las 17.00 horas, avanzan desde El Gobierno local, también está programada una video-conferencia entre Sánchez y el resto de presidentes autonómicos “para abordar toda la situación relativa a la pandemia”.

El artículo 116.2 de la Constitución Española ampara al Gobierno para declarar el estado de alarma, en todo el territorio nacional o solo en parte, en caso de ”catástrofes, calamidades o desgracias públicas, tales como terremotos, inundaciones, incendios urbanos y forestales o accidentes de gran magnitud", así como ante "crisis sanitarias, tales como epidemias y situaciones de contaminación graves”. En estos casos, la Constitución contempla la posibilidad de decretar una serie de medidas drásticas en situaciones de alarma nacional, entre ellas la limitación del movimiento de personas, lo que puede incluir la reducción del transporte público, limitar la circulación o permanencia de personas o vehículos en horas y lugares determinados, o condicionarlas al cumplimiento de ciertos requisitos. Una circunstancia que en Ceuta tendría connotaciones singulares si la limitación de movimiento de personas alcanza a las conexiones marítimas.  Eso sí, en el peor de los casos: corte de conexiones marítimas de pasajeros se mantendría el abastecimiento de mercancías.

“Estamos solo en la primera fase del combate contra el virus. Nos esperan semanas muy duras. No cabe descartar que alcancemos los 10.000 afectados la próxima semana”, ha advertido este viernes Pedro Sánchez en una comparecencia telemática. De momento, declaración del estado de alarma tiene una vigencia de dos semanas y sólo se podrá prorrogar con autorización expresa del Congreso de los Diputados, que en este caso podrá establecer el alcance y las condiciones vigentes durante la prórroga.

Además de limitar la circulación o la permanencia de personas o vehículos en horas y lugares determinados; también se podrán requisar temporales de bienes o prestaciones personales obligatorias; intervención de industrias, fábricas, talleres, explotaciones o locales de cualquier tipo a excepción de domicilios privados. El Gobierno puede limitar también el uso de servicios o el consumo de artículos de primera necesidad y garantizar el abastecimiento de los mercados y la producción de los productos de primera necesidad. 

El alcance de las medidas, que pueden ser drásticas, es aun una incógnita y puede alcanzar también al cierre de comercios, salvo los de alimentación y primera necesidad, siguiendo el paso de Madrid, Galicia y algunos puntos del País Vasco, para reducir al máximo los desplazamientos. El presidente de Centro Comercial Abierto de Ceuta, Juan Torres, explicaba este viernes a Ceuta al Día que estaño “como todos, a la expectativa”, admitiendo que a la vista de la situación, con comercios y calles vacías, “lo más lógico” es cerrar.