El Boletín Oficial del Estado publica este martes la Orden INT/578/2020, de 29 de junio, por la que se modifican los criterios para la aplicación de una restricción temporal de viajes no imprescindibles desde terceros países a la Unión Europea y países asociados Schengen por razones de orden público y salud pública con motivo de la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19 y por la que se mantiene el cierre, con carácter temporal, de los puestos terrestres habilitados para la entrada y la salida de España a través de las ciudades de Ceuta y Melilla, acordado en la Orden INT/270/2020, de 21 de marzo.

Esta orden surtirá efectos desde las 00:00 horas del 1 de julio hasta las 24:00 horas del 8 de julio de 2020, sin perjuicio de su modificación para responder a nuevas recomendaciones en el ámbito la Unión Europea.

Una apertura que, no obstante, sería “simbólica” en el caso de España, matizó la ministra de Exteriores, Arantxa González Laya, pues solo afecta a un lado de la frontera, el español, y queda a expensas de la decisión de Marruecos, que ha prolongado su estado de alarma hasta el 10 de julio.

Ya el pasado mes de abril, Marruecos insinuaba los pasos fronterizos de Ceuta y Melilla seguirán cerrados hasta otoño. Así lo adelanta el diario El Español, que aseguraba que la medida, tomada por el presidente del Gobierno, Saadeddine El Othmani, y los ministros de Sanidad e Interior, Khalid Ait Taleb y Abdelouafi Laftit, ha sido ya comunicada de forma oficial al Gobierno español. Desde Delegación de Gobierno en Ceuta niegan que haya, de momento, un aviso oficial al respecto. Tampoco con la Ciudad tienen información oficial, ha explicado el consejero de Sanidad, Javier Guerrero, asegurando que sus planes van solo hasta el 15 de mayo. Después ya se verá, ha adelantado.

El objetivo no es solo blindarse ante la pandemia de covid-19 sino, de paso, terminar de ahogar el porteo y, de paso, la economía ceutí. En el camino se ahogan también miles de trabajadores transfronterizos, muchos de ellos empleadas de hogar, así como los más de 200 marroquíes varados en la ciudad autónoma, miles más en toda España, atrapados por el cierre de las fronteras con Marruecos. El cierre, según el diario digital, se mantendría pese al fin del confinamiento en España e incluso durante la Operación Paso del Estrecho —lo que ha terminado confirmándose— reconduciendo a los viajeros magrebíes lejos de las ciudades autónomas.