Esta vez ha sido General Motors quien se ha quedado compuesto y sin novia, que diría el refrán. El fabricante estadounidense de automóviles, que hace menos de un mes se
echó atrás en la venta de Opel a la canadiense Magna, ha visto cómo el fabricante de vehículos
superdeprtivos Koenigsegg ha retirado su oferta por la marca sueca Saab, según ha informado este martes la compañía en un comunicado.