En el "primer capítulo de la segunda temporada", según palabras del consejero Yamal Dris, del desmadre de Santa Catalina se repite la historia: el Gobierno no ve ningún "fallo" en la ejecución del Parque Periurbano, cree que por mal que esté cualquier tiempo pasado fue peor, sigue pidiendo y pagando informes técnicos y hasta padece alucinaciones y ve proliferación vegetal donde no hay más que tierra (poca y mala, ya lo dijo Tragsa) o plástico.

El consejero de Servicios Urbanos ha asegurado este jueves en el Pleno que “bochornoso y lamentable” era el estado de Santa Catalina cuando era un vertedero “y se veían las columnas de humo desde Algeciras”, no con el parque actual, que según ha recordado el socialista Manuel Hernández es un erial en el que se han gastado unos 10 millones de euros para tener un vergel del que no ha quedado ni la sombra.

Pese a que el año pasado ya se encargó un estudio técnico a Tragsatec que dejó claro qué había fallado, Dris ha dicho que se van a pedir nuevos informes a los técnicos y que en los Presupuestos de la Ciudad para 2020 habrá consignación para intervenir en el área.

“Las plantas que se han puesto han sido autóctonas”, ha dicho el consejero en referencia a la vegetación colocada, entre ella decenas de olivos a precio de oro. “El césped se ha quemado con la salinidad y el viento, no prospera la frondosidad que se quiere”, ha explicado Dris, que también ha reconocido el fracaso en la consolidación de taludes, que actualmente muestran en múltiples puntos las capas plásticas que cubren los residuos de antaño.

El consejero ha dicho que donde se concluya que “no se puede plantar” nada se van a poner “zonas de juego para menores, para hacer deporte... Cosas para hacer deporte, dar un paseo, correr, etcétera”. “Vamos a intentar echar tierra con buenos nutrientes a ver si así las plantas van hacia adelante”, ha añadido el miembro del Ejecutivo, que sin embargo no ve “ningún fallo técnico, porque algo falla”, en la ejecución del proyecto.

Paradójicamente sí ha detectado comportamientos reprochables el Tribunal de Cuentas, según cuyos informes la Administración autonómica incurrió el múltiples irregularidades en el seguimiento de una obra que el Gobierno dio por finiquitada ante los medios justo antes de las elecciones de 2015.

Hernández ha criticado el estado del mobiliario urbano y las zonas de juego infantil, que las fuentes no funcionan y están oxidadas, que no se ven más que árboles muertos... “Es lamentable que se haya gastado tantísimo dinero de todos los ceutíes para, al final, encontrarnos esto: decían que iba a ser la zona verde más importante de Ceuta y allí no hay verde por ninguna parte”, ha resumido.