El Gobierno ha actualizado el estado de ejecución y cumplimiento de plazos de las obras pendientes desde la última legislatura, todos adjudicados a Tragsa, y que formaban parte del programa electoral del PP en las pasadas Elecciones a la Asamblea de Ceuta, asumiendo que arrastran notables retrasos, especialmente la obra estrella, la reforma de la Gran Vía, Jáudenes y Plaza de África, que acumula ya un año del plazo de ejecución anunciado inicialmente y que ahora se aplaza de nuevo “hasta diciembre”, al igual que las obras de la avenida Claudio Vázquez.

Al igual que sucedió con la Semana Santa, el Gobierno ha garantizado que la calle Jáudenes se abrirá al paso de peatones coincidiendo con la procesión de la Patrona, la Virgen de África.

Antes se harán realidad el ascensor del Chorrillo, que estará operativo “la próxima semana o la siguiente” y la pasarela peatona de Miramar, que entrará en servicio a primeros de agosto; la pista de atletismo, adelantó el portavoz del Gobierno, Alberto Gaitán, ha dado ya sus primeros pasos con el movimiento de tierras. Si se cumple el plazo previsto, algo que la empresa pública Tragsa no ha logrado en ninguno de los proyectos acometidos en Ceuta, la pista de atletismo estará lista en 18 meses.

El 82,9 por ciento de los proyectos previstos por el Gobierno en la pasada legislatura están en ejecución, lo que supone alrededor de 60 millones de euros en obras en marcha, pero ninguna rematada. “Es un dato muy elevado, si tenemos en cuenta años pasados y supone 60,7 millones de euros”, valoraba el portavoz del Ejecutivo, Alberto Gaitán en su comparecencia semanal tras el Consejo de Gobierno. Aún en licitación está el 14 por ciento, alrededor de 10,5 millones y un 2,6 por ciento está todavía en proyecto, alrededor de dos millones de euros por ejecutar.