La Guardia Civil mantendrá durante la noche del 1 de enero “la misma” dotación para la vigilancia del perímetro fronterizo de Ceuta “que cualquier otra madrugada”. Aunque durante los últimos años han sido recurrentes los intentos de salto en grupo del doble vallado que separa la ciudad autónoma de Marruecos en fiestas especialmente señaladas como Nochebuena o Nochevieja, el Instituto Armado no alterará el ritmo de trabajo habitual de las unidades especializadas de refuerzo: una de servicio, otra en alerta y la tercera de descanso.

Fuentes de la Comandancia local de la Benemérita han explicado este lunes a Ceutaldia.com que actualmente dispone, al margen de los efectivos propios de plantilla, de dos equipos de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) y de una Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) conformados en ambos casos por agentes especializados en el control de masas y actuaciones antidisturbios.

Las Fuerzas de Seguridad marroquíes rechazaron durante la madrugada del pasado 20 de diciembre a unos 200 migrantes subsaharianos en el primer intento de entrada irregular en Ceuta en grupo desde el 22 de agosto, cuando lo consiguieron 116 indocumentados que fueron devueltos al día siguiente al país vecino.

Según las fuentes policiales consultadas, las autoridades españolas no tienen conocimiento del asentamiento de grandes grupos de migrantes subsaharianos en las zonas boscosas que rodean Ceuta, aunque en ocasiones anteriores su desplazamiento desde ciudades próximas como Tetuán Tánger se ha registrado en pocas horas.

La pasada Nochebuena fueron los migrantes irregulares magrebíes que pretenden llegar a las costas andaluzas partiendo desde las playas de su país o, sobre todo, desde Ceuta, los que más trabajo dieron al Servicio Marítimo de la Benemérita, que interceptó a 54 ciudadanos marroquíes y argelinos residentes en el CETI local intentando cruzar el Estrecho a bordo de dos pateras y una neumática.