Eduardo Madina, ex candidato a las primarias del PSOE y diputado por Bizkaia entre 2004 y 2017, ha pasado por Ceuta para recoger el Premio María Miaja por su compromiso por la igualdad, precisamente, destacaba, cuando estamos “metidos en una etapa histórica  donde el gran combate de la humanidad en los países desarrollados es la igualdad, básicamente la igualdad de la mujer”.

Madina ha alertado que la ola de nacional populismo que recorre el mundo es una amenaza a la democracia, más aún cuando tiene a la mujer y sus derechos en la diana: “Los procesos que denominamos extrema derecha  en el mundo, Bolsonaro, Trump, aquí Vox, han hecho del ataque directo a los derechos de la mujer su naturaleza política. Lo hemos visto en el último pacto de Gobierno en Andalucía. Por eso creo que esa cuarta ola por la plena equiparación de derechos entre hombres y mujeres tiene más razón de ser que nunca”.

Para el socialista vasco, el feminismo es la clave para derrotar a la extrema derecha: “Todas las esperanzas de los sistemas democráticos están hoy en la capacidad de que el feminismo tiene de parar esta grave amenaza a la democracia que son las fuerzas nacional-populistas de extrema derecha”. Y hay un ejemplo muy cercano en el tiempo y la distancia, el pacto de PP, Cs y Vox con la Ley de Violencia de Género sobre la mesa. “Han muerto más de 800 mujeres desde que hay registros, más o menos 15 años, y la derecha  quiere desmontar la Ley de Violencia de Género en Andalucía”.

El peligro de la sed de poder de PP y Cs

Madina advierte de los peligros de generalizar para encontrar una respuesta a este fenómeno, que ha cruzado todas las líneas rojas –el racismo, el machismo, el fascismo- “Es una reacción a los desajustes de estoque denominamos la globalización que produce procesos similares pero distintos. Nada tiene que ver lo que ha pasado en Andalucía con lo que ha pasado en Brasil, no creo que tenga mucho que ver Le Pen con Bolsonaro, mantienen matrices, las denominamos extrema derecha, pero las realidades sociológicas, países, circunstancias políticas y económicas muy distintas”.

En Andalucía el caso es otro, la ambición de poder cueste lo que cueste. Derrocar al PSOE de su bastión aunque haya que pactar con el diablo. “PP y CS, que por su vocación de querer gobernar, que es legítima, han empezado a Gobernar con un partido que es una grave amenaza a la democracia española y van a hacer que la gobernabilidad de Andalucía, sus presupuestos, sus leyes, los derechos de 8 millones y medio de personas dependan de un señor que viene contra esos derechos y esas libertades”.