Hace un año comparecía ante el Pleno del Ayuntamiento el concejal de Juventud, Deporte, Turismo y Fiestas, Fernando Ramos a petición de la oposición para dar explicaciones “sobre la inexistente política deportiva y en concreto de la nefasta gestión desarrollada por el Instituto Ceutí del Deporte”, recuerdan desde MDyC denunciando que el ICD deberá reconocer extrajudicialmente una deuda de más de medio millón de euros con Arasti Barca, la empresa que subcontrata a los monitores deportivos.

En esa comparecencia aseguraba que el contrato de monitores de piscina: “Está en su última fase para ponerlo en marcha en breve y está únicamente pendiente de la subrogación del personal, para poder darle forma al pliego.” Ha pasado un año y el concurso sigue sin adjudicarse, “además de asumir a dos personas más por obligación legal, no parece existir voluntad política para sacar adelante el concurso”, barajan desde MDyC.

La empresa Arasti Barca MA SL continúa realizando los servicios ante la inexistencia de otro adjudicatario “por la desidia con la que la gerencia del ICD actúa”, apuntan desde MDyC, “que sí puede desplazarse a Conferencias Sectoriales de Deporte a cualquier lugar de España, pero desconocemos qué es lo que aprenden o lo que exponen en las mismas porque no existe política deportiva en el Desgobierno del Sr. Vivas”.

El Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC) denuncia que, ante tanta incuria que derrocha el Desgobierno del Sr. Vivas, se deberá aprobar un nuevo reconocimiento extrajudicial de deuda superior al medio millón de euros a esta empresa correspondiente a todo el año 2016, porque no han sido capaces de sacar un concurso para que el servicio se preste con todas las garantías legales.

El MDyC mostró su preocupación “por el apremio con que el Gobierno quiso aprobar el anterior reconocimiento extrajudicial de deuda a esta empresa, un problema que generó la inacción, la incapacidad y la dejadez de todos los que han pasado por el ICD hace ya más de seis años: la explotación por parte de la empresa Arasti Barca de los monitores y socorristas de las piscinas municipales una vez acabado el plazo de vigencia del contrato”. Se logró paralizar el expediente y reducir la “supuesta deuda” en casi 200.000 euros, “aunque siguen sin darnos explicaciones a muchas de las facturas que se incluyeron en aquella liquidación y de las que no estamos conformes o porque ya se han debido pagar o porque no se han prestado los servicios”.

El MDyC exige al responsable del ramo que saque el concurso definitivamente y lo adjudique para evitar nuevos reconocimientos extrajudiciales de deudas.