Es de agradecer para quienes trabajan (trabajamos) también en verano que refresque en días laborables y suban las temperaturas durante los fines de semana, aunque este mes de julio se está pasando de frenada: Tras un jueves con los termómetros acercándose a la treintena y calma chicha en el Estrecho, este viernes, tras breves intervalos de Levante, volverá a rolar el viento a Poniente subiendo de paso la temperatura por encima de los 30 grados.
Una tónica que se mantendrá durante todo el fin de semana, con cielos despejados, máximas en torno a los 30 grados centígrados, con una sensación térmica por encima de los 32 y un fuerte descenso de la humedad relativa hasta el 45 por ciento y viento de componente Oeste de flojo a moderado, pudiendo ser moderadamente fuerte a mediados de semana.