Enero suele ser un mes propicio para revisar objetivos y proyectos y eso parece estar haciendo el Ejecutivo que preside Juan Vivas, más si se atiende que la próxima cita con las urnas (mayo de 2019) se acerca inexorablemente. El portavoz del Ejecutivo, Jacob Hachuel, ha anunciado este viernes que el Gobierno del Partido Popular renuncia a una de sus más viejas promesas electorales: trasladar y construir dos mercados nuevos, uno en el centro y otro en Hadú. El Gobierno ha rebajado sus pretensiones y se ha propuesto llevar a cabo una modernización de ambos espacios a lo largo de 2019, o si los plazos lo permiten en este mismo 2018.

Ninguno de los dos proyectos cuenta aún con presupuesto, pero si con ideas básicas de actuación o líneas maestras sobre las que se desarrollarán los proyectos.

Así Hachuel ha detallado que en el caso del mercado del centro, ya existe un estudio topográfico y se está ahora mismo realizando otro patológico, para saber de modo más exacto cuál es el estado de la instalación y qué es lo que se puede acometer y qué no. La idea del Ejecutivo es modernizar un espacio “costumbrista”, que se ha convertido en “una pieza fundamental de la compra habitual de los ceutíes”, para aproximarlo más a la tendencia actual de potenciar entorno a los puestos de mercadería fresca otros de restauración que complementen la experiencia del cliente.

Ese es el objetivo para ambos espacios, tanto el de Hadú como el del centro, sobre el se le ha recordado a Hachuel que el Gobierno lo calificó de “ruinoso” en su estado hace algún tiempo. El portavoz del Ejecutivo ha pedido tiempo para que se avance en los estudios, se complete el patológico y una vez con ellos se permita a los arquitectos trabajar en el desarrollo de un proyecto para un mercado de futuro, aunque ubicado en las mismas instalaciones actuales –al menos por el momento esa es la idea-.

En lo que se refiere al de Hadú, el Ejecutivo va a recuperar el viejo proyecto para su modernización. Un proyecto que incluía una ampliación y la construcción de un estacionamiento de vehículos con el que esperan resucitar la instalación y convertirla en otro punto neurálgico para la compra de los ceutíes en esa zona de la ciudad. Y todo sin que pierda ese punto “costumbrista” ninguna de las dos instalaciones.