La aprobación del Consejo de Gobierno de la subida salarial de un 1,5 por ciento es solo la parte más pequeña y la única de obligado cumplimiento del acuerdo alcanzado por el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, y los sindicatos más representativos del sector público (CC.OO., UGT y CSIF) para la mejora de salarios y condiciones laborales de los empleados públicos suscrito el pasado viernes.

Un aumento en la nómina que debe acompañarse por otras medidas que la Ciudad ha ignorado en su propuesta y que ha provocado que los representantes sindicales se levantaran de la mesa de negociación convocada este viernes. No es una ruptura, matizan, volverán a sentarse el próximo 24 de julio, confiando en que la consejera de Hacienda y Administraciones Públicas, Kissy Chandiramani, replantee su propuesta, que incluye la subida salarial pero ignora el resto de medias acordadas.

Representantes de UGT, CCOO y CSIF recuerdan que el acuerdo alcanzado con Montoro incluía la recuperación de derechos perdidos durante la crisis y la negociación de la implantación de la jornada de 35 horas.