En un acto que casi se alarga hasta las dos horas de duración, el Partido Popular de Ceuta ha aprovechado para arrancar la campaña y de paso presentar en público la candidatura con la que concurrirá a las próximas elecciones generales del 20 de diciembre (20D). “La mejor de todas”, según el presidente de la formación, Juan Vivas. Y lo ha hecho coincidiendo en lugar común entre los 5 oradores, y también con lo que parece va a ser el núcleo central de la campaña de los populares en el conjunto del país: El PP, como último y único baluarte o bastión de la unidad de España, la “indivisible” y en la que todos “los españoles tengan los mismos servicios y las mismas oportunidades”.

Sólo Vivas, que intervino el último alcanzó hasta ese matiz, los demás fueron subrayando uno a uno al partido y a Rajoy como la garantía ante una patria que algunos quieren deshacer, sin englobarlo en algo más que puro debate territorial marcado desde el órdago catalán, como sí hizo el presidente.

Pero además, todos coincidieron también en resucitar, si es que alguna vez, desapareció de los discursos a Zapatero para simbolizar las sombras y la zozobra económica de la que el país ha logrado salir hacia la luz y la estabilidad gracias a la gestión de los populares y al esfuerzo de los españoles. Esta misma idea la expresaron con diferentes palabras: Yolanda Bel en papel de anfitriona y secretaria general, los candidatos al Senado: Fátima Mohamed Dos Santos y Guillermo Martínez, el candidato al Congreso, Juan Bravo y el presidente, Juan Vivas.

“Tampoco se puede poner España en manos de quienes nos amenazan con el pasado que nos llevó al abismo”, aludió Vivas al PSOE, que unos cuántos metros más allá acababa de celebrar otro acto con Patxi López.

Economía, o más concretamente, recuperación económica desde la crisis total en la que recogieron el país: Estado de “casi quiebra”; “amenazado el estado del bienestar”; “pensiones congeladas”; “uno de cada dos parados que se generaban en Europa, eran españoles; ahora es español uno de cada dos empleos que se crean”; “ya nadie se acuerda de la prima de riesgo”… y así un largo etcétera, por un lado. Y por otro, la unidad de España, “indivisible” y con preferencia por Ceuta y Melilla. “El dato más importante es que el pasado sábado nos pusieron a los candidatos de Ceuta y Melilla en primera fila al lado de Mariano Rajoy y no donde nos tocaba por orden alfabético”, aludió Bravo. “Con el PP estamos en primera fila, con otros en el mejor de los casos pasamos a la cuarta o la quinta, en el peor ni salimos en la foto”, ha dicho Vivas, “y tengo pruebas”, ha retado a quien le quisiera poner en duda la afirmación.

Dos ejes nacionales que encuentran perfecto acomodo entre el electorado ceutí que recibirá además un mensaje adaptado a la especial sensibilidad local en el asunto territorial, tanto en lo económico, en forma de apoyo al régimen económico y fiscal especial que “otros erróneamente considera una dádiva cuando es una herramienta para paliar las particularidades desventajas de la ciudad”, ha recordado Vivas; y en el apoyo a Ceuta como región geográficamente alejada y con derecho a sentirse en igualdad al resto del Estado. “Nosotros no nos escondemos y valoramos el patriotismo en positivo”, ha llegado a decir Vivas. 

Y también de forma destacada todos han citado un plan del Gobierno de Rajoy el 20-2020, que se ha marcado como objetivo que en ese año, en 2020 el país cuente con 20 millones de cotizantes en la Seguridad Social.

Y más coincidencias en los discursos. Para el PP, Ciudadanos es el partido de la ambigüedad bien calculada que está más pendiente de salir bien en las fotos que de otra cosa; Podemos es populista, con soluciones que rozan o están “contra el marco democrático y constitucional”, Bel dixit. Y ambos son “experimentos, y el país no está para experimentos”. Tras descartar la opción de renovar la forma de hacer política se mira al PSOE, donde lo que se recuerda es la gestión de Zapatero y la llegada de la crisis económica. Así las cosas, sólo le queda una opción a la ciudadanía, votar al PP, según el discurso esgrimido este martes en el Parador Muralla por los candidatos y mandamases populares. Unos argumentos que repetirán durante los 26 días que restan hasta llegar a las urnas.

Juan Bravo

El acto sirvió también para que Juan Bravo hablara por primera vez a la militancia popular. Ante unas 250 personas y un salón abarrotado, Bravo se presentó en público con buen tono y una oratoria notable, apoyándose en una tableta.

Quizás lo más destacado es que Bravo ha respondido a las críticas que de forma privada ha venido haciendo la militancia desde que fue nominado por la dirección del partido dejando en la cuneta al diputado, Francisco Márquez, del que sólo se acordó en los discursos, Fatima Mohamed Dos Santos, quizás porque fue el único de los parlamentarios nacionales que no acudió a dar el testigo y respaldar a sus compañeros.

Bravo entiende las críticas como “justificadas”. No se ha escondido y ha manifestado su militancia en el PP desde el año 2005. El candidato al Congreso ha reconocido que “era arriesgado introducirme” al dar las gracias a Vivas por el respaldo. Militante desde 2005, y con “Votos únicos y muy claros desde los 18 años”, el mallorquín de nacimiento y valenciano de adopción reivindicó su caballismo, tan a gusto está su familia aquí que le han dicho “nosotros nos quedamos, tú vete donde quieras”.

Y si no pisó la sede de los populares en Ainara, algo que ha reconocido, fue por un motivo: “Preservar la independencia del organismo para el que trabajo y que me ha dado todo”, la Agencia Tributaria. Por eso, entendía Bravo que no debía mostrar sus afinidades políticas. Tan convencido está de que esa independencia y transparencia es necesaria que Bravo ha recordado que ha renunciado a su cargo en el organismo fiscal, "sin tener necesidad de ello ni estar obligado".

Además de los elogios habituales, Vivas dedicó tiempo al hablar de Bravo de otro asunto que centra las críticas sobre el candidato su encarnizada lucha contra los funcionarios que se benefician de la fiscalidad del residente sin pasar medio año más un día al menos en la ciudad. Vivas señaló a Bravo, si es que no lo estaba señalado ya por la Asociación Afectados por Hacienda, como fiel defensor de las bondades del Régimen Especial Fiscal de Ceuta que sirve, ha recordado Vivas, “para ayudar a quienes crean empleo y riqueza en la ciudad, no a quienes quieren usarlo para la evasión”.

Guillermo Martínez

En lo más personal, el candidato al Senado se destapó señalando tres razones por las que es militante del PP:

“Me identifico con la línea programática; tienen los mejores equipos y Juan Vivas y Nicolás Fernández y sus equipos son un buen ejemplo de esto y no hay otro partido que defienda los intereses de Ceuta como el PP, que lleva en su ADN que España es indivisible”.

Así ha arrancado el PP ceutí una campaña en la que vuelven a partir como claros favoritos y no se divisa a nadie en frente capaz de hacer frente o disputar si quiera a media distancia la hegemonía popular en las urnas. La siguiente formación en votos el pasado mayo obtuvo tres veces menos que los populares que ahora necesitan sólo un voto más que sus adversarios para ser elegidos. Con ese panorama, más que a guiño de ánimo, como suele ser habitual en esta clase de actos, las alusiones del tipo “nos dará muchas alegrías desde Madrid” sonaban más a afirmación real que otra cosa.