Gobernación sospecha que la han engañado en la compra de las cubas de Bomberos


Gobernación sospecha que la han engañado en la compra de las cubas de Bomberos

- La cantidad de agua que pueden albergar las cubas no coincidiría con lo establecido en el pliego de condiciones de la licitación según han alertado los funcioanrios tras las primeras pruebas

- Los nuevos vehículos, que se presentaron a finales de diciembre, fueron adquiridos mediante un sistema de renting por casi un millón y medio de euros

La Consejería de Gobernación sospecha que la han engañado en última compra. El pasado 27 de diciembre el presidente Juan Vivas y el consejero Jacob Hachuel presentaban los nuevos camiones del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS), entre ellas tres cubas que podrían no cumplir el pliego de condiciones del concurso al disponer de menos capacidad de la acordada, concretamente 500 litros menos.

Para aclararlo, la Consejería anuncia “una medición exhaustiva para conocer si la capacidad de las cubas de tres de los vehículos que fueron adquiridos a finales de diciembre (…) se corresponde con la que figuraba en el pliego de condiciones de la licitación. Además se ha decidido la instrucción de un procedimiento administrativo si se detecta que, efectivamente, su capacidad es inferior”.

La Consejería de Gobernación ha tomado esta decisión después de que los propios efectivos de Bomberos hayan detectado, durante la realización de algunos servicios en los últimos días, que las cubas – de 1.500, 2.000 y 5.000 litros de capacidad – se agotaban antes de lo esperado y que su capacidad real podría ser inferior en unos 500 litros a lo que le corresponde.

Para corroborar tal eventualidad, el SEIS realizará las pruebas que considere oportunas para comprobar si la capacidad de las cubas es menor de lo indicado en la documentación de los vehículos y se iniciará el correspondiente expediente informativo para depurar las responsabilidades que de ello se deriven.

Las pruebas se realizarán utilizando un caudalímetro, instrumento de medida de gran precisión.

La compra constaba de un vehículo ligero contra incendios 4×4, cuyo precio asciende a 46.000 euros; una bomba urbana ligera con capacidad para 1.500 litros de agua (303.800 euros); una bomba urbana pesada de 2.500 litros (329.900 euros); una bomba rural pesada de 5.000 litros (273.900 euros); un vehículo autoescalera automática de 27 metros (543.500 euros), en total una compra de casi un millón y medio de euros adjudicada al BBVA por 1.476.948 euros.

Una operación de compra que empezó a fraguarse en 2014, explicó el presidente durante la presentación de los nuevos vehículos y que ha cristalizado ahora, gracias “al crédito que tienen esta institución con las entidades bancarias”, presumió Vivas.

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