En este sentido, la propuesta que pretende Caballas llevar al próximo Pleno de la Asamblea , un Pacto por la Ciudadanía y la Diversidad, reabre de nuevo un debate necesario e importante: Nuestro modelo de sociedad, nuestro modelo de ciudad y en definitiva, nuestro modelo de convivencia. Así pues, cualquiera que conozca mínimamente la heterogeneidad y diversidad de los ceutíes, entenderá que el modelo intercultural debe ser la piedra angular de nuestro modelo de convivencia. Un modelo donde todas y cada una de las sensibilidades y realidades culturales y sociales de nuestra ciudad convivan dentro de un marco de igualdad, libertad y respeto mutuo.
Es por ello que el Pacto por la Ciudadanía y la Diversidad debería superar el trámite plenario sin dificultad, un pacto que como bien remitía Caballas a los medios de comunicación tiene por ejes:
- Implantar medidas educativas y pedagógicas en las Escuelas Ceutíes que consoliden y promocionen los valores de diversidad, respeto y tolerancia.
- Dotar a la comunidad educativa de instrumentos para hacer frente a las manifestaciones de intolerancia, odio y rechazo al otro.
- Reformar y modificar la programación de los medios de comunicación públicos con el fin de sensibilizar a la opinión pública y que a su vez recojan la diversidad cultural y lingüística de nuestra ciudad.
- Reforzar la acción de la sociedad civil ceutí dotándola de formación e instrumentos económicos y pedagógicos para desarrollar iniciativas encaminadas hacia la diversidad y respeto intercomunitario.
En conclusión, no podemos mantenernos a espaldas de la realidad y la realidad refleja desgraciadamente un aumento de los crímenes de odio. Y ante estos crímenes la única arma es el conocimiento, la educación y la pedagogía.