Dos de los trabajadores de Emvicesa sentados en el banquillo han declarado, pero sólo han contestado a su abogado, ante lo que la Fiscalía ha leído sus declaraciones previas durante la instrucción, llenas de contradicciones y delaciones, tanto que uno reconoció entonces que "siempre había escuchado que se vendían casas" o que "el procedimiento de las 317 (lista fantasma) era una locura". Hoy sin responder a la fiscalía y sólo ante su abogado han negado que "nunca jamás" hicieran nada.