Los representantes sociales que promueven en la calle la movilización anexionista sobre Ceuta y Melilla no paran. Ahora anuncian otra marcha para el próximo sábado, pero en esta ocasión sobre la ciudad hermana, a la que las localidades limítrofes vienen amenazando durante los últimos días con cortarle el suministro de agua que recibe desde manantiales del país vecino. Según informan este domingo diferentes diarios marroquíes como 'Aujord'hui' el autodenominado 'Comité de Coordinación para la Liberación de Melilla' ha acordado este sabado "durante una reunión con la participación de representantes de la sociedad civil y funcionarios electos locales organizar una manifestación que partirá a las 11.00 horas desde Beni Enzar.

A través de un comunicado, el Comité justifica su iniciativa en "la persistencia de los colonialistas españoles en ambientes políticos hostiles a los intereses supremos de Marruecos". Según su lectura dicha postura se refleja en "la extraña posición adoptada por el Parlamento español para torpedear el proceso de negociaciones llevadas a cabo bajo los auspicios de las Naciones Unidas" sobre el Sahara.

El Comité ha acogido "con satisfacción" la posición del Parlamento marroquí, concretada la noche del viernes y el sábado pasados, para exigir a su Gobierno que reevalúe sus relaciones con España, que lleve las dos ciudades autónomas a la ONU y que solicite visados a los españoles para acceder a su territorio.

"Las realidades históricas y geográficas muestran que España es un país colonizador y su presencia en la tierra de Marruecos es un ejemplo perfecto", ha concluido el Comité, que se pregunta por qué "el Parlamento español interfiere en los asuntos internos de Marruecos, un país soberano, cuando observó un silencio inquietante sobre los crímenes cometidos por España en el Rif, incluyendo el uso de gas venenoso".

El Comité ha pedido al Gobierno marroquí que "deje de jugar el papel de gendarme de Europa" y ha instado a poner en manos de ACNUR las "condiciones inhumanas" en que, según su parecer, viven los subsaharianos en Melilla.

Diferentes organizaciones juveniles organizaron para el sábado pasado una marcha que debía haber llegado a la frontera ceutí y que no llegó siquiera a partir de Rabat después de que sólo un centenar de personas acudieran a su llamada.

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