Vivas destina al Príncipe en tres años menos que al Campus Universitario en dos

Vivas destina al Príncipe en tres años menos que al Campus Universitario en dos

- El barrio recibe menos inversión que su peso en población

- Muchas carencias seguirán esperando una solución

- UDCE ha llevado a Pleno 70 iniciativas para mejorar el barrio

- En 2011 la partida destinada al proyecto que se hará en la parcela de las caracolas sólo cuenta con 144.000 euros


El porvenir nunca tuvo mejor publicidad que en El Príncipe Alfonso. Ni nunca en otra geografía fue tan cierta la frase del poeta Ángel González: “Te llaman porvenir / porque no vienes nunca”. Cuando la poesía bajó a la política encontró una herramienta llamada presupuesto para dibujar el futuro, el porvenir. Y mucho más, cuantificarlo. Año tras año, ejercicio presupuestario tras ejercicio presupuestario, el Gobierno del Partido Popular presidido por Vivas ha recogido en sus Presupuestos Generales de la Ciudad Autónoma de Ceuta inversiones para el barrio, calificado de marginal por propios y extraños. Pero la realidad, tozuda, sigue dictando marginalidad, falta de recursos y problemas pendientes que en lugar de ir solucionándose van haciéndose más complejos . Así lo expresan, viven y sienten los vecinos que conviven cada nuevo día con su tragedia cotidiana. Los números de la inversión prevista por Vivas y recogida en sus presupuestos dejan pocas dudas: se cumpla o no, la inversión prevista no alcanza para arrancar al barrio de las garras de la delincuencia y la marginalidad.

Quizás muchas inversiones son pura publicidad de un porvenir mejor, marketing político. Y así, se suceden los planes especiales uno tras otro desde hace dos décadas sin que ningún Gobierno afronte realmente los problemas. Tampoco el de Vivas, por más que lo haya prometido o que llegara a cortejar la idea de colocar al fallecido Mizzian al frente de la ejecución del resucitado Plan Especial o, con posterioridad, incluso al ex todopoderoso Pedro Gordillo.

Da igual. Su fama de marginal, abandonado, olvidado, inseguro y atrasado, si alguna vez había sido pequeña, ahora llegará hasta Bruselas gracias en parte, a los esfuerzos hechos por el Gobierno para que los integrantes de la Comisión Mixta del Congreso y el Senado para la Unión Europea conocieran las particularidades de Ceuta. El Príncipe es una más de esas famosas especificidades, como el precio del barco, la frontera o el Régimen Económico y Fiscal. Lo decían los vecinos en la víspera de la visita “somos el ‘cepillo’ de Ceuta ante la UE”. Y parte de razón llevan a la vista de los presupuestos.

El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta publicita inversiones multimillonarias, englobadas unas veces bajo el nombre ‘Plan Especial Príncipe Alfonso’ otras sencillamente recogidas sin tanto bombo en el Plan de Inversiones para toda la ciudad. Es el caso de estos últimos, los previstos para 2011.

El PP sacó adelante con sus 19 diputados el Presupuesto para 2011. Unión Demócrata Ceutí y PSOE votaron en contra, IU se abstuvo. Ese documento, propuesto y aprobado por el Gobierno de Vivas, recoge una inversión en el Príncipe durante los próximos tres años (de 2011 a 2013) de casi 14 millones de euros (13.962.000). Es menos que la cantidad que prevé invertir en el Campus Universitario en sólo dos años (2012 y 2013). Para esa obra el Ejecutivo de Vivas prevé 16,7 millones.

La inversión prevista para el Príncipe por el Ejecutivo de Vivas de aquí a 2013 se centra en tres proyectos: la pista de atletismo (4,4 millones), la urbanización de la barriada (2,41 millones de euros) y una actuación prevista en la parcela de las caracolas otros 7,1 millones, pero en 2011 sólo se prevén 144.000 euros, después en 2012 y en 2013 llegarán 3,5 millones cada año. Es decir que esa actuación tendrá que esperar. Es el porvenir del principio, el del Príncipe.

Se compare con lo que se compare, la inversión en el barrio más marginal y con más carencias parece, cuanto menos, insuficiente. Los 13,9 millones de euros que prevé Vivas destinar entre 2011 y 2013 contrastan con los 10,8 que se irán a parar sólo a la Manzana del Revellín en el mismo periodo, los 16,7 del Campus en dos años (2012-2013), los 19,8 del Plan Aparca (2011-2013), sólo en material inventariable para la administración la ciudad gastará en esos tres años 1,6 millones de euros. El año que viene, 2011, esa partida por ejemplo, será más grande que la destinada a la actuación en las Caracolas. 52 cargos políticos cuestan al año 3 millones de euros, 9 millones en tres años, si no se suben el sueldo o se incrementa el número de asesores.

Y eso es lo que recoge el texto presupuestario en inversiones a tres años. El líder de la oposición, Mohamed Alí, deslizó en el debate presupuestario que “reales para 2011 para el Príncipe hay 200.000 euros”. Luego habrá qué ver cuánto de ese dinero se ejecuta y llega realmente a convertirse en actuaciones en el barrio. Habrá que ver cuánto de ese porvenir viene.

Y tampoco sirve la excusa de que en los años precedentes se invirtió mucho. La mayor inversión que se ha realizado en la zona, salvando el hospital, son las 225 VPO que están justo enfrente del barrio y que han servido para desalojar las Caracolas. Costaron más de 23 millones de euros. El 99 por ciento de esa inversión salió de las arcas del Estado, según recuerda el gerente de Emvicesa, Antonio López. A la Ciudad Autónoma apenas le costó dinero. Y los Fondos Europeos destinados a la barriada son multimillonarios también.

8 por ciento de la inversión

Si consideramos que Ceuta tiene 80.000 habitantes, de los que en la barriada habitan unos 10.000, en el Príncipe vive el 12,5 por ciento de la población de toda la ciudad. El Gobierno de Vivas prevé destinar a ese núcleo casi 14 millones de euros de los más de 173 millones en total que recoge su Plan de Inversiones para el conjunto de Ceuta. La inversión para el Príncipe es el 8 por ciento del total de la prevista entre 2011 y 2013 para toda Ceuta. Menos de lo que por población le correspondería. Eso, sin tener en cuenta que la barriada es, de largo, la que más carencias sufre de toda la ciudad y debería, por tanto, recibir una mayor inyección en forma de inversiones.

Es cierto que finalmente es muy probable que el barrio reciba más cantidad de la destinada a las tres actuaciones referidas, (urbanización, caracolas y pista de atletismo). Se construyen viviendas protegidas a marchas forzadas, con fondos del Estado gestionados por la administración local, fondos que en muchos casos beben a su vez de las ayudas europeas. Es lógico pensar también que el Gobierno va a reponer alumbrado y mobiliario urbano, pero aún así, la sensación que deja lo recogido en el Plan de Inversiones es que el Ejecutivo de Vivas no siente la urgente necesidad de cambiar el barrio, al menos, no como quisieran los vecinos, a los que el corazón les late más fuerte cuando echan un vistazo a la miseria que les rodea y bajan luego a darse una vuelta por el cuidado centro.

Con todo la apuesta del Gobierno de Vivas para los próximos años es mejor que la que planteó en los presupuestos de 2009.

Plan 2009-2013

Por aquel entonces, preveía invertir entre 2009 y 2013 en la barriada 19 millones de euros, de los que 6,5 salían directamente de las arcas de la Unión Europea para un proyecto que sigue desarrollándose hoy en día: la urbanización de la barriada. De hecho cuando a partir de 2010 preveían haber consumido el dinero proveniente de Europa de los 8 millones de 2009 y los 3,2 de 2010 se pasaba a destinar a ese cometido de urbanización la tarifa plana de 500.000 euros anuales, lo mismo que sigue vigente en el Plan de Inversiones que recogen los vigentes presupuestos para 2011.

Esos 19 millones representaban menos aún que los actuales 13,9. Ya que la inversión prevista por el equipo de Vivas entre 2009 y 2013 ascendía a 344,5 millones de euros. Lo destinado al Príncipe representaba el 5,5 por ciento, si se le restaba los fondos europeos el 3,6 por ciento, de toda esa inversión.

En ese plan de inversiones de 2009, Vivas y su Gobierno proyectaron invertir entre ese año y el 2013 por ejemplo 1,7 millones de euros sólo en la plaza Mari Carmen Cerdeira, otros 320.000 euros en la calle Cervantes, otros 166.000 euros en la calle González de la Vega, cerca de un millón en la III Fase de remodelación de la zona centro (calle Real), 1,23 millones de euros más para reparaciones en el recién inaugurado parking de la plaza de los Reyes. Incluso recogieron una inversión de 3 millones de euros en el 2011 para el nuevo estadio de fútbol. En material inventariable para ese periodo preveían gastar cerca de 5 millones de euros.

Con estas cifras la pregunta de si El Príncipe es una prioridad para el gobierno de Vivas parece responderse por sí misma. La “eficaz” gestión de la Presidencia de la era Vivas (10 años en unos meses) no parece haber logrado solucionar los muchos problemas que tiene una de las barriadas más pobladas de Ceuta.

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Consulte los documentos:

Iniciativas de UDCE para el Príncipe

Plan de Inversiones de Vivas 2011-2013

Plan de Inversiones de Vivas 2009-2013

Vivas destina al Príncipe en tres años menos que al Campus Universitario en dos


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