Los musulmanes ceutíes viven su última jornada de ayuno antes de cerrar, este miércoles, el Ramadán

Los musulmanes ceutíes viven su última jornada de ayuno antes de cerrar, este miércoles, el Ramadán

- Entre seis y ocho autobuses prestarán servicio de transporte gratuito hasta Loma Margarita, donde celebrará su Musal-la la UCIDCE, desde el Sarchal, la Estación de Ferrocarril, Hadu y Príncipe Felipe a partir de las 8.15 horas

- La comunidad islámica ceutí dará inicio a tres días de celebraciones que Maateis desea que sirvan para hacer borrón y cuenta nueva "para trabajar juntos en un proyecto común por esta ciudad sumando y no restando"


Con un puñado menos de kilos en muchos casos y evidentes ojeras en muchos otros pero con la casi unánime certeza, según confiesa la mayoría, de haber limpiado el cuerpo y el espíritu, de haber recargado las pilas después de someterlas a una prueba máxima, los aproximadamente 40.000 musulmanes que residen en Ceuta viven este martes su última jornada de ayuno para comenzar a celebrar, desde este miércoles a primera hora de la mañana, el final del mes de Ramadán.

Mientras en Oriente sus correligionarios ya festejan el momento, los fieles islámicos locales aguardan que esta noche el Consejo de Ulemas de Marruecos, por el que se rige el rito en la ciudad, confirme que vuelve a verse la luna nueva y que, con ella, termina el mes de ayuno.

Los musulmanes se levantarán este miércoles, que se augura seco y soleado, para acudir a las mezquitas a cumplimentar el primer rezo del día alrededor de las 6.15 horas. Después, de vuelta a casa, los que no hayan tenido tiempo antes procederán a lavarse y acicalarse, vestir ropa nueva si tiene la oportunidad y los medios y desayunar (a diferencia de la Pascua del Sacrificio, en la que no se ingieren alimentos hasta después de la Musal-la, según la Sunna).

A las 8.15 horas los fieles que no dispongan de medios propios para desplazarse hasta Loma Margarita, donde volverán a celebrar su rezo comunitario al aire libre las más de 40 comunidades islámicas federadas en la UCIDCE, podrán utilizar los autobuses que partirán desde el Sarchal (recorriendo el centro), la Estación de Ferrocarril (por Villajovita y el Sardinero), Príncipe Felipe y Loma Colmenar y San José-Hadu.

Las previsiones apuntan a que a las 9.00 horas los asistentes deberían estar ya congregados en la explanada para, entre cánticos de agradecimiento y glosas a la grandeza de Alá, esperar la subida al púlpito del imam que dirigirá el rezo, cuyo nombre volverá a no revelarse hasta ese momento. Cuando termine su 'khutbah', se procederá a una traducción en castellano del contenido de la misma.

Hombres y mujeres, cada sexo por su lado, se felicitarán al término de la oración, momento en el que está previsto que se pasen por Loma Margarita también las autoridades (Vivas visitará antes la Musal-la auspiciada por el denominado Consejo de Fieles de Sidi Embarek al lado de la mezquita) civiles y militares para compartir un desayuno de confraternización.

"Libertad" para abrir o cerrar las mezquitas

"A partir de ahí", ha explicado el presidente de la UCIDCE, Laarbi Maateis, comenzarán tres días de fiesta (hasta el 3 de septiembre) en el que los musulmanes deberán 'pagar' la 'deuda' que los más pudientes acarrean en términos religiosos con los menos favorecidos (el Zakat) y cumplirán con su costumbre de visitarse, felicitarse y hacer borrón y cuenta nueva. "Es un momento para que todos, personas y entidades, asumamos errores y perdonemos los de los demás para construir un futuro mejor por esta ciudadanía ceutí que merece un proyecto común en el que todos sumemos y no restemos", ha resaltado.

Maateis ha querido dejar claro que el Islam no establece, en ninguna de sus Escuelas ni en los seis libros de la Sunna, que el terreno en el que se desarrolle la Musal-la deba ser de propiedad musulmana o que su convocatoria tenga que venir precedida "por una regla de consenso con oenegés y asociaciones financieras o deportivas".

La Directiva UCIDCE ha dado "total libertad" para que las asociaciones islámicas adscritas a su estructura abran o cierren las mezquitas que gestionan. "Por norma islámica la Musal-la debe celebrarse al aire libre salvo lluvia o causa de fuerza mayor, pero para evitar ninguna suspicacia cada entidad hará lo que estime oportuno", ha reseñado Maateis.

Los musulmanes ceutíes viven su última jornada de ayuno antes de cerrar, este miércoles, el Ramadán


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