Tras 21 años de matrimonio contractual, la adjudicataria saliente del servicio de limpieza pública viaria, Urbaser, ha llevado a los Juzgados a la que hasta ahora ha sido su cliente, la Ciudad Autónoma, para dirimir allí la liquidación de dos décadas trabajando juntas. La empresa ha presentado tres demandas judiciales para exigir a la Administración local que le pague casi 10 millones de euros que a su juicio le adeuda por asuntos fuera de contrato además de los entre 3 y 6 millones que, según a la fuente a la que se atienda, se le deben por facturación ordinaria.

Según han explicado distintas fuentes de la Asamblea a Ceutaldia.com, se trata de tres demandas judiciales: una, por más de 3,5 millones de euros, se refiere a las tareas realizadas, a juicio de la empresa, al margen de las obligaciones contenidas en el pliego de condiciones de la adjudicación, en los polígonos del Tarajal; otra, por "cerca de tres", sobre los incrementos salariales que se pactaron justo antes de Semana Santa de 2008 con la mediación del Ejecutivo de Vivas (y un posible acuerdo del Consejo de Gobierno que lo refrenda) para evitar una huelga; y una tercera sobre los intereses legales generados por ambas supuestas moras.

Al Gobierno ceutí, que ya se había reunido con la gente de Florentino Pérez para llevar la ruptura por los cauces más amistosos posibles, le ha sorprendido, en primer lugar, la cantidad reclamada, que según sus cifras no pasaba de 4 ó 5 millones de euros.

"Seguimos creyendo, sea cual sea la cifra, que nos asiste la razón, y por eso no se incluyeron estas supuestas deudas en el Plan de Pago a Proveedores de enero de 2012", han recordado desde el Ejecutivo ceutí, a cuyo alrededor algunos técnicos abogan por intentar llegar a un acuerdo judicial que liquide la relación al margen de los Tribunales.

Queda por saldar, además, la facturación ordinaria del servicio, por la que se adeudan entre 3 y 6 millones de euros, dos o cuatro meses de trabajo, según la fuente a la que se escuche, sobre la que también hay alguna discrepancia en relación con los recursos materiales ya amortizados y el destino que tendrán, ya que Urbaser, que "no hace declaraciones" sobre este asunto, parece tener la intención de todo aquello por lo que no obtenga una contraprestación económica.

El próximo 1 de febrero el contrato de recogida de residuos sólidos urbanos, limpieza viaria y contenedores pasará a ser asumido por la UTE ACC-Lirola.

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